El piloto dominicano de los Mets, Luis Rojas, entiende en carne propia cuánto Robinson influyó en el juego del béisbol y las muchas puertas que abrió a las minorías el legendario Jackie Robinson.
Nueva York–Aunque el Día de Jackie Robinson celebra que el miembro del Salón de la Fama se convirtiera en el primer jugador en romper la barrera del color en Grandes Ligas, los relatos acerca de Robinson tienden a enfocarse en su impacto en la comunidad afroamericana.
El piloto dominicano de los Mets, Luis Rojas, entiende en carne propia cuánto Robinson influyó en el juego del béisbol, tomando en cuenta que su padre, Felipe Rojas Alou, le siguió a su compatriota Osvaldo “Ozzie” Virgil en las Mayores en convertirse en el primer dominicano en jugar de manera regular en las Mayores.
Más de medio siglo después, Luis Rojas se convirtió en el primer capataz dominicano en dirigir a los Mets, siguiendo los pasos de su padre – el primer piloto dominicano en MLB (Expos, 1992).
“Sólo podemos decir gracias, Jackie Robinson”, exclamó Rojas. “Para mí, estar aquí ahora y poder hacer lo que me gusta todos los días es gracias a él. Él abrió muchas puertas para que las minorías pudieran formar parte del juego. Sólo nos queda decir gracias”.
Los Mets siempre han mantenido a Robinson cercano a su historia, dado que su organización nació de los restos de los viejos Dodgers de Brooklyn. Una de las insignias es la Rotonda de Jackie Robinson en el Citi Field, la cual tiene como principal atracción una escultura con el Nro. 42 y algunas frases célebres grabadas del miembro del Salón de la Fama.
“Impactó a mucha gente”, manifestó Rojas. “Impactó muchas vidas. Vean dónde estoy yo ahora – todo es gracias a él”.