El Ministerio de Asuntos Exteriores en Moscú adelantó que sumará a otros ocho funcionarios estadounidenses a su lista de sancionados.
Miami, Florida—El gobierno de Rusia pedirá la salida de diez diplomáticos estadounidenses de su país en represalia por la expulsión de un número igual de diplomáticos rusos por parte de Washington anunciada el jueves.
El canciller ruso, Sergey Lavrov, anunció el viernes que Moscú también añadirá a ocho funcionarios de Estados Unidos a su lista de sancionados y restringirá e impedirá las actividades de organizaciones no gubernamentales estadounidenses para que no interfieran en la política de Rusia.
Estados Unidos explicó que la expulsión de los diplomáticos rusos y otras sanciones fueron una respuesta a «acciones malignas» promovidas por Kremlin, como la supuesta interferencia en las elecciones de noviembre y ataques cibernéticos contra instalaciones federales. Rusia niega todas las acusaciones, informa la Voz de América.
Anteriormente, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, calificó las sanciones de inaceptables, incluso cuando dejaron la puerta abierta a un diálogo entre los dos países.
El presidente estadounidense, Joe Biden, defendió este jueves las medidas y desveló que en una conversación con su homólogo ruso Vladimir Putin esta semana le advirtió que pudo haber llegado más “lejos con sus sanciones”, pero que decidió ser “proporcional”.
Biden dijo también que durante la llamada se habló sobre la creciente presencia militar que Rusia está desplegando en su frontera con Ucrania y sobre la ocupación de la península de Crimea.
El presidente, sin embargo, expresó que pese a las sanciones está buscando un acercamiento con Rusia y le propuso a Putin que ambas partes sostengan una reunión en Europa, que podría tener lugar en el verano.
“No vamos a iniciar una escalada del conflicto con Rusia, queremos una relación estable y predecible”, apuntó Biden, quien también afirmó que si Rusia sigue interfiriendo en la democracia estadounidense está preparado para tomar otras medidas.