La entidad hemisférica califica las recientes medidas del presidente salvadoreño, Nayib Bukele, como retaliación y un ataque directo a la libertad de prensa.
Miami, Florida–La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó profunda preocupación y calificó las recientes medidas del gobierno del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, como un «grave atentado contra la democracia».
El 5 de mayo la Asamblea Legislativa con mayoría oficialista aprobó con 68 votos a favor sobre 84 diputados, reformas a la Ley de Imprenta de 1950 para eliminar las exenciones fiscales en la importación de materia prima, maquinaria y equipo para la impresión de materiales. Esta situación afecta aún más a la industria periodística local, golpeada por una crisis económica de años, agudizada por la pandemia.
«Observamos con perplejidad e indignación las decisiones del presidente, quien aupado por legisladores oficialistas, viene tomando decisiones que trastocan la democracia salvadoreña», expresó Jorge Canahuati, presidente de la SIP.
«Ya teníamos conocimiento de que Bukele la había emprendido contra los medios de comunicación, pero con las recientes disposiciones dejó claro que se trata de una retaliación y un ataque directo a la libertad de prensa, con consecuencias devastadoras», enfatizó Canahuati, CEO de Grupo Opsa, de Honduras.
Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, dijo que «el irrespeto del presidente a la independencia de los poderes del Estado también quedó de manifiesto en la ilegal destitución de los jueces de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, y del fiscal general». Jornet, director del diario La Voz del Interior, de Argentina, añadió: «Esto es un grave atentado contra la democracia, y exhortamos a la comunidad internacional a denunciarlo de forma vigorosa».
El informe sobre el estado de la libertada de prensa en El Salvador, presentado hace unas semanas ante la reunión semestral de la SIP, resaltó: «La libertad de expresión y de prensa experimenta el más grave deterioro de la posguerra, con un gobierno que presiona, amenaza y expresa abiertamente desprecio hacia los medios y periodistas independientes e instituciones».
Los directivos de la SIP adelantaron que la organización evalúa distintas acciones internacionales para hacer frente a la situación de El Salvador.