El aspirante a la presidencia de Colombia, Rodolfo Hernández, de 77 años, dijo que cancela sus apariciones en público hasta el 19 de junio, día de la segunda vuelta electoral, porque considera que su vida está en peligro. El excalde de Bucaramanga calificó a Petro y su campaña como una «banda criminal», en medio de las disputas de parte y parte entre los dos candidatos.
Bogotá, Colombia — El candidato independiente a la presidencia de Colombia Rodolfo Hernández anunció el jueves la cancelación de sus apariciones en público al considerar que su vida está el peligro, a un poco más de una semana de la segunda vuelta de las elecciones.
Hernández, de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, se encuentra en un empate técnico en las encuestas junto con su rival, el izquierdista Gustavo Petro, del Pacto Histórico, en el balotaje para suceder al presidente Iván Duque a partir de agosto.
«Tengo la certeza de que mi vida está en riesgo», dijo Hernández citado en un comunicado de su campaña, que precisó que «el político tomó la decisión de cancelar todas las apariciones públicas desde hoy hasta el 19 de junio», el día del balotaje.
Un portavoz de la policía dijo que el organismo no tiene información sobre las amenazas y que están investigando.
A su turno, Duque dijo que los candidatos tienen las garantías de seguridad gubernamentales.
«No sabemos en detalle esta referencia pero lo que sí podemos decir es que los candidatos tienen toda la protección y todas las garantías por parte del Estado colombiano para su seguridad», precisó Duque a periodistas.
En mayo, Petro canceló eventos en una región cafetalera del centro del país luego de que su oficina en el Senado alertó sobre un complot de una banda criminal para asesinarlo.
Hernández, de 77 años, calificó a Petro y su campaña como una «banda criminal», en medio de las disputas de parte y parte entre los dos candidatos.
El exalcalde de Bucaramanga, que acumuló una fortuna en la industria de la construcción, ganó popularidad por sus apariciones en la red TikToK y propuestas contra la corrupción.
No obstante, el político es investigado por presuntamente intervenir en una licitación en un contrato de recolección de basuras mientras era alcalde para beneficiar a una empresa por la que su hijo había cabildeado, acusaciones que rechaza.