El Día de la Tierra: Una jornada para tomar conciencia de los efectos negativos del cambio climático en el planeta. La ONU y expertos de NASA, entre otros, avisan de las graves consecuencias de las altas temperaturas, que están provocando fenómenos atmosféricos adversos. Por eso, piden actuar de inmediato para no agravar está situación.
Miami, EEUU — Las Naciones Unidas reconocen el 22 de abril como el Día Internacional de la Tierra, una jornada que sirve para concienciar a la población de la situación climática que hay en el planeta, a causa del calentamiento global, el cambio climático y otros fenómenos atmosféricos que, en la mayoría de casos, son factores provocados por el hombre.
“El cambio climático, los cambios provocados por el hombre en la naturaleza, así como los crímenes que perturban la biodiversidad -como la deforestación, el cambio de uso del suelo, la producción agrícola y ganadera intensiva o el creciente comercio ilegal de vida silvestre- pueden acelerar el ritmo de destrucción del planeta”, explican desde la ONU a través de un comunicado.
La Tierra continúa registrando temperaturas cada vez más cálidas y el 2022 fue el sexto año con las temperaturas más altas desde 1880, según un informe elaborado por científicos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, en inglés) y la Administración Nacional de los Océanos y la Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos.
Aumento de las temperaturas
La investigación concluye que la superficie terrestre y oceánica superó en 0,86 grados Celsius el promedio del siglo XX, que está en 13,9 grados Celsius.
“Continuamos en esta grave tendencia de aumentos de temperatura. Y otro dato importante es que los últimos nueve años han sido los más calientes desde que empezamos a tomar medidas”, asegura Carlos del Castillo, jefe del Laboratorio de Ecología Oceánica del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, en declaraciones a la Voz de América, convencido de que “el problema es que la tendencia es inexorablemente de aumento de temperatura a lo largo de este ciclo”.
Sin embargo, el aumento de las temperaturas en todo el planeta no se da de manera equitativa, sino que hay lugares donde se acentúa aún más este calentamiento.
“Por ejemplo, en el Ártico, en los hemisferios, en las latitudes más altas hacia el norte, pues el cambio puede ser de hasta cuatro veces más. Y en algunos lugares es un poco menos del promedio, y eso se debe a patrones de corrientes marinas y vientos, entre otras cosas”, decía el experto.
Los recursos de NASA
Para ello, la NASA ha puesto una “gran cantidad de recursos y de trabajo en tratar de entender cómo nuestro planeta funciona y está cambiando” a consecuencia del “aumento y la intensidad de los eventos meteorológicos, como las lluvias torrenciales, las nevadas más extremas, sequías más secas y más largas olas de calor”.
La agencia aeroespacial estadounidense cuenta con recursos suficientes para poder monitorear algunos de estos fenómenos, de manera que se puede ver, con datos científicos, cuál es el alcance ante esta situación, informa la Voz de América.
“La NASA es una agencia espacial y precisamente por eso, desde la gran ventaja de estar en el espacio, podemos observar todo el planeta. Tenemos una flota de satélites que están dedicados a mirar varios aspectos del planeta Tierra”, dice Castillo.
“La Tierra es un súper organismo”
Para tomar conciencia de esta situación, dice el experto de la NASA, “debemos pensar en el planeta como si fuera un súper organismo”, es decir, que va cambiando de acuerdo a ciertos factores y circunstancias. “Al igual que nosotros tenemos diferentes órganos, el planeta Tierra tiene su atmósfera, sus océanos, las capas polares, y todos estos sistemas interaccionan. Para poder entender cómo funciona, tenemos que mirar todos estos aspectos y lo mejor es mirarlos al mismo tiempo”.
Con los satélites desplegados por el espacio, “se pueden tener observaciones de cómo el planeta se está desarrollando y también tenemos científicos que van al campo, al mar y a los bosques y toman medidas para luego hacer trabajos de laboratorio” y “modelos numéricos que se utilizan no solamente para predecir el futuro, sino para entender el presente”.
El impacto del calentamiento global
Gracias a eso, se ha podido comprobar que el aumento de las temperaturas en todo el planeta no se da de manera equitativa, sino que hay lugares donde se acentúa aún más este calentamiento. “Por ejemplo, en el Ártico, en los hemisferios, en las latitudes más altas hacia el norte, pues el cambio puede ser de hasta cuatro veces más. Y en algunos lugares es un poco menos del promedio, y eso se debe a patrones de corrientes marinas y vientos, entre otras cosas”, dice el experto de NASA.
Del Castillo avisa que “los aumentos de temperatura en el planeta tienen efectos muy negativos” y sus consecuencias ya se están viendo hoy en día. “Estamos experimentando aumentos de eventos climáticos extremos, en los lugares que son secos se están secando más, los lugares en los que llueve mucho está lloviendo mucho más y se están intensificando los huracanes”, detalla.
El panorama a corto plazo
Aunque Del Castillo defiende que “la civilización humana no va a desaparecer”, considera que “no vamos a estar viviendo con la comodidad que vivimos ahora”, y eso se acentuará en regiones con menos recursos económicos para afrontar las consecuencias del cambio climático, entre los que destacarían algunos países de América Latina.
“Lamentablemente, los grupos de personas que no tienen los recursos para adaptarse son los que van a sufrir las consecuencias más graves de este cambio climático”, pronostica.
Por eso, los científicos especializados en el medio ambiente y el cambio climático sostienen que las proyecciones para los próximos años no auguran un mejor panorama a futuro. “Las ondas cálidas están aumentando, también la intensidad de las nevadas, la de los huracanes y hay un mayor número de fuegos. Todas estas cosas están aumentando y van a continuar aumentando”, finalizaba Del Castillo.