Cerca de 200.000 jóvenes y peregrinos recibieron al papa Francisco en el santuario dedicado a la Virgen María en Fátima, Portugal. Este domingo cierra la JMJ 2023 con una eucaristía multitudinaria
Fátima, Portugal — El papa Francisco visitó este sábado el Santuario de Nuestra Señora de Fátima en Portugal, donde la Iglesia católica dice que se apareció la Virgen María a tres niños pastores el siglo pasado, y rezó el rosario junto a un grupo de presos y jóvenes con algún tipo de enfermedad.
Su llegada al santuario católico ocurre en el marco de la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud 2023 (JMJ), celebrada en Lisboa.
Unos 200.000 jóvenes y peregrinos acudieron a Fátima este sábado, según el portal Vatican News.
El pontífice llegó en el llamado papamóvil a la explanada del santuario dedicado a la Virgen María. Luego rezó el rosario junto a seis reclusos y 102 jóvenes enfermos, sentado frente a la imagen de Nuestra Señora de Fátima, informa la Voz de América.
Desde la Capilla de las Apariciones, el papa aseguró que ese templo sin puertas es un ejemplo de la Iglesia de Cristo, “acogedora, para que todos puedan entrar”.
En Fátima, un importante lugar para la fe católica de Portugal, el papa dedicó buena parte de sus palabras a hablar de la madre de Jesús, María, de quien dijo que “siempre tiene el corazón abierto para todos sus hijos, sin exclusión”.
Tras pedir un “pequeño instante de silencio”, insistió en que la Virgen María “acoge” a todos los cristianos y “señala a Jesús” para seguir sus indicaciones.
Según la Iglesia Católica, la madre de Jesús se apareció en Fátima para revelar a tres pastores la necesidad de orar por la paz en Portugal y en todo el mundo.
El viaje del papa a Fátima significó una pausa a su peregrinación a Lisboa, donde la noche de este sábado participará en una vigilia con cerca de 1 millón de jóvenes.
El domingo, Francisco presidirá la eucaristía central de las JMJ de este año y se revelará cuál será la sede de la próxima jornada mundial de los jóvenes católicos.