"Ahora es el momento de que las partes venezolanas inicien discusiones sobre una transición pacífica y respetuosa, de acuerdo con la ley electoral venezolana y los deseos del pueblo venezolano", señala un comunicado firmado por Vedant Patel, portavoz del Departamento de Estado. (Imagen: Fuente externa).

El Obispo Rolando Álvarez detenido injustamente durante 500 días en Nicaragua. Un vocero del Departamento de Estado señaló que, además del obispo Álvarez, “muchos líderes religiosos siguen detenidos injustamente en Nicaragua, incluido el obispo Isidoro Mora y varios sacerdotes”

Washington, EEUU – El gobierno de los Estados Unidos reiteró su llamado al régimen de Nicaragua para que libere de inmediato a un sacerdote mantenido en prisión por supuestamente conspirar contra la dictadura de Daniel Ortega.

El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, señala en un comunicado que “El presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo han encarcelado injustamente al obispo Rolando Álvarez durante 500 días.”

El funcionario estadounidense añadió que “Durante ese tiempo, las autoridades nicaragüenses mantuvieron aislado al obispo Álvarez, bloquearon la evaluación independiente de las condiciones de su encarcelamiento y publicaron videos y fotografías montados que solo aumentan las preocupaciones sobre su bienestar.”

El portavoz del Departamento de Estado subrayó que “Una vez más hacemos un llamado al gobierno de Nicaragua para que libere de inmediato y sin condiciones al obispo Rolando Álvarez.”

Además del obispo Álvarez, indicó que “muchos líderes religiosos siguen detenidos injustamente en Nicaragua, incluido el obispo Isidoro Mora y varios sacerdotes.”

El vocero concluye que “El régimen Ortega-Murillo continúa imponiendo severas restricciones a las comunidades religiosas y negando a los ciudadanos nicaragüenses la capacidad de practicar libremente sus religiones y expresar sus creencias.”

El portavoz del Departamento de Estado expresó que “además del obispo Álvarez, muchos líderes religiosos siguen detenidos injustamente en Nicaragua, incluido el obispo Isidoro Mora y varios sacerdotes.”