Damian Williams, Fiscal Federal para el Distrito Sur de Nueva York, e Ivan J. Arvelo, Agente Especial a Cargo de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional («HSI») de Nueva York, revelaron el miércoles dos encausamientos contra los empleados de la aerolínea Delta, indica un comunicado
Nueva York, EEUU – Las autoridades federales en esta ciudad presentaron cargos contra cuatro empleados de una línea aérea a quienes se les imputa llevar de contrabando dinero del narcotráfico y llevarlo en efectivo a la República Dominicana, por un monto de 8 millones de dólares, utilizando sus privilegios de seguridad en el aeropuerto John F. Kennedy
Damian Williams, Fiscal Federal para el Distrito Sur de Nueva York, e Ivan J. Arvelo, Agente Especial a Cargo de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional («HSI») de Nueva York, revelaron el miércoles dos encausamientos contra los empleados de la aerolínea Delta, indica un comunicado.
Los acusados fueron identificados como los asistentes de vuelo Charlie Hernández, Sarah Valerio Pujols, Emmanuel Torres y Jarol Fabio. A los cuatro se les imputan varios delitos relacionados con su presunta complicidad durante años en el contrabando de ganancias del narcotráfico desde los Estados Unidos a la República Dominicana en vuelos comerciales. Todos los acusados fueron arrestados el martes.
La fiscalía federal precisa que Pujols y Fabio fueron presentados en el tribunal federal de Manhattan ante el juez federal Gary Stein, mientras Hernández y Torres serían llevados a los tribunales para lectura de cargos más tarde ante el mismo magistrado.
El fiscal federal Damian Williams dijo: “Como se alega, estos asistentes de vuelo pasaron de contrabando millones de dólares en dinero de la droga y fondos de las fuerzas del orden que pensaban que era dinero de la droga desde los Estados Unidos a la República Dominicana durante muchos años abusando de sus privilegios como empleados de aerolíneas.”
Mientras que el agente especial a cargo de HSI, Ivan J. Arvelo, dijo: “Como se alega, los acusados, a sabiendas, contrabandearon grandes cantidades de dinero ilícito vinculado a la venta de narcóticos, incluido el fentanilo, y aprovecharon los puntos de control de seguridad del aeropuerto utilizando sus puestos de confianza como asistentes de vuelo.”
Según el pliego acusatorio del Departamento de Justicia, durante el período relevante todos los imputados se desempeñaron como empleados y asistentes de vuelo en diferentes aerolíneas internacionales que operaban rutas entre la ciudad de Nueva York y la República Dominicana.
Todos los acusados tenían estatus de “Tripulante Conocido” (“KCM”) ante la Administración federal de Seguridad del Transporte, lo que les permitía pasar por un carril de seguridad especial en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy y otros aeropuertos con menos escrutinio que los pasajeros normales. En total, los acusados contrabandearon aproximadamente $8 millones en efectivo a granel desde los Estados Unidos a la República Dominicana.
De ser declarado culpables, los acusados todos residentes de Nueva York, podrían enfrentar penas que oscilan entre 5 a 10 años de prisión.