- El Comando Sur de Estados Unidos indicó que el USS Helena, un submarino de ataque rápido de propulsión nuclear, llegó el jueves a aguas cercanas a la base estadounidense de Guantánamo, Cuba
- Otros barcos estadounidenses también han estado rastreando y monitoreando los ejercicios rusos que, según funcionarios del Pentágono, no representan una amenaza para Estados Unidos
Washington, EEUU — Un submarino de la Armada de Estados Unidos llegó a la Base Naval de Guantánamo, Cuba, en una demostración de fuerza, a solo horas de que Rusia desplegara en La Habana una flotilla de combate que incluye un submarino de propulsión nuclear y una fragata capaz de portar misiles hipersónicos.
El Comando Sur de Estados Unidos dijo que el USS Helena, un submarino de ataque rápido de propulsión nuclear, se detuvo en las aguas cercanas a la base estadounidense en Cuba el jueves, reportó la cadena ABC.
En tanto, al asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que no había pruebas de que Rusia transfiriera misiles a Cuba, pero que Estados Unidos permanecería alerta, informa nuestra aliada de medios, la Voz de América.
La parada es parte de una «visita rutinaria al puerto», mientras el submarino viaja a través de la región del Comando Sur, indicó el mando militar regional en una publicación en sus redes sociales, en la que precisó que «la ubicación y tránsito del navío fueron planeados con antelación».
“Esto no es una sorpresa. Los hemos visto hacer este tipo de escalas en puertos antes”, dijo el miércoles la portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, cuando se le preguntó sobre los ejercicios rusos. “Por supuesto que nos lo tomamos en serio, pero estos ejercicios no representan una amenaza para Estados Unidos”.
Singh dijo que no sería una sorpresa ver más actividad rusa alrededor de Estados Unidos en tales ejercicios globales. Los simulacros se realizan en aguas internacionales, y los funcionarios estadounidenses esperan que los barcos rusos permanezcan en la región durante el verano y posiblemente también se detengan en Venezuela.
Otros barcos estadounidenses también han estado rastreando y monitoreando los ejercicios rusos que, según funcionarios del Pentágono, no representan una amenaza para Estados Unidos.
Los ejercicios, sin embargo, se producen menos de dos semanas después de que Joe Biden autorizara a Ucrania a usar armas proporcionadas por Estados Unidos para atacar dentro de Rusia para proteger Járkov, la segunda ciudad más grande de Ucrania. El presidente ruso, Vladimir Putin, sugirió entonces que su Ejército podría responder con «acciones asimétricas» en otras partes del mundo.
Los barcos rusos han atracado ocasionalmente en La Habana desde 2008, cuando un grupo de embarcaciones rusas entró en aguas cubanas, en lo que los medios oficiales describieron como la primera visita de este tipo en casi dos décadas.
En julio de 2023, La Habana calificó como «una escalada provocadora» la presencia en la estación naval de EEUU de un submarino de propulsión nuclear. A ello, el Departamento de Estado y el Pentágono respondieron que «seguiremos volando, navegando y trasladando activos militares donde nos lo permita el derecho internacional».
[Con información de Reuters y AP]