El Ministerio enfatizó que, desde la década de los 80, el flujo migratorio desde Haití hacia República Dominicana ha crecido considerablemente, lo que motivó la firma de un acuerdo bilateral en 1999 para regular las repatriaciones
Santo Domingo, República Dominicana- El Gobierno dominicano ha reafirmado ante la comunidad internacional su postura en relación con la inmigración haitiana y las acusaciones recibidas por parte de las autoridades de Haití.
Mediante una nota diplomática, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó que las repatriaciones de inmigrantes indocumentados no son actos de discriminación, sino una respuesta necesaria ante la presión económica que representa la inmigración irregular en servicios públicos gratuitos como salud y educación.
La comunicación oficial, titulada «Posición dominicana sobre asuntos esenciales de las relaciones con Haití incluyendo la migración», fue enviada tanto al cuerpo diplomático acreditado en el país como a las misiones dominicanas en el extranjero.
El Ministerio enfatizó que, desde la década de los 80, el flujo migratorio desde Haití hacia República Dominicana ha crecido considerablemente, lo que motivó la firma de un acuerdo bilateral en 1999 para regular las repatriaciones.
En dicho convenio, Haití reconoció el derecho dominicano a deportar a ciudadanos haitianos en situación irregular y se comprometió a controlar el flujo migratorio y documentar a sus ciudadanos.
Además, la Cancillería recordó que, desde el inicio del gobierno del presidente Luis Abinader, se ha mantenido una política de «Buena Vecindad» con Haití, basada en el diálogo y el respeto mutuo.
En enero de 2021, Abinader se reunió con el entonces presidente haitiano Jovenel Moïse para pactar una agenda de cooperación, pero el asesinato de Moïse en julio de ese mismo año interrumpió el avance en los acuerdos.
El MIREX reiteró la disposición del Gobierno dominicano para seguir promoviendo el diálogo con Haití, buscando soluciones que beneficien a ambas naciones.
Asimismo, instó a la comunidad internacional a respaldar los esfuerzos dominicanos y a colaborar en el fortalecimiento de la gobernanza migratoria para aliviar la crisis que enfrenta Haití y sus repercusiones en la región.