- La votación se retrasó desde el jueves por un discurso de siete horas del líder republicano de la Cámara, Kevin McCarthy.
- El paquete aprobado alcanza un monto de 2-Billones de dólares.
Washington, D.C.–La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este viernes el paquete de gastos sociales y climáticos de 1,75 billones de dólares del presidente Joe Biden después de meses de discrepancias entre los demócratas y esfuerzos de los republicanos para bloquear la votación.
La votación transcurrió dentro de las líneas partidistas para un total de 220 a 213, pero el legislador demócrata de Maine Jared Golden votó en contra del proyecto y ningún republicano a su favor, informa la Voz de América.
La presidenta de la cámara, Nancy Pelosi, celebró la victoria y describió la aprobación de la iniciativa, conocida como Ley Reconstruir Mejor, como “histórico” y “monumental”.
“Es lo mayor que hemos hecho hasta ahora”, dijo Pelosi en una conferencia de prensa.
La votación del paquete en la Cámara Baja estaba programado para el jueves, pero fue retrasado por un largo discurso del líder de la minoría republicana Kevin McCarthy, quien habló por más de siete horas hasta la madrugada.
El masivo paquete de inversiones, que inicialmente ascendía a 3,5 billones de dólares, aún incluye fondos para la educación, reducción de costos médicos y medidas para enfrentar el cambio climático.
Muchas objeciones contra la iniciativa surgieron después de que la Oficina de Presupuesto del Congreso calculó que elevaría el déficit federal en 367.000 millones de dólares en 10 años, muy por encima de las recaudaciones de impuestos proyectadas de 127.000 millones de dólares hasta 2031.
Sin embargo, la Casa Blanca afirma que cambios en el Servicio de Rentas Internas (IRS) generarán 400.000 millones de dólares adicionales y que el proyecto ayudará a reducir los déficits en 121.000 millones dólares en una década.
Algunos demócratas moderados dijeron que necesitaban el cálculo de la Oficina de Presupuesto del Congreso antes de votar, pero varios de ellos expresaron finalmente que aceptaban la matemática de la Casa Blanca.