La viruela del mono ha planteado otro dilema a los expertos de la OMS y del mundo sobre cómo combatir esa no tan nueva enfermedad que se ha propagado a varios países. Incluso, hasta el nombre quieren cambiarle para evitar malos entendido. (Imagen: Fuente externa).

Lo peor de todo el caso, / es la confusión que reina. / En medio del desencanto: ¿Alguien sabe quién gobierna?

Por Cantaclaro

La cosa está tan revuelta,
que no hay acuerdo ninguno.
Para la acción bien resuelta,
hace falta un buen tribuno.

Con la viruela del mono,
hasta el nombre se cuestiona.
Como si fuera otro tono,
nadie la quiere y menciona.

Si es la viruela común,
como pica y da escozor.
Agonía y mucho ardor.
Marca el cuerpo con rubor.

Pero con achaque símico,
de origen desconocido,
y sus efectos raquíticos,
todo anda como torcido.

Lo peor de todo el caso,
es la confusión que reina.
En medio del desencanto:
¿Alguien sabe quién gobierna?

Si es la viruela sin mono.
O el mono con la viruela.
Que dejen ese relajo:
¡Con el mono y la cadena…!