El fantasma de un aire enrarecido merodea los ambientes polìtico y social en el paìs, lo que no deja espacio a la reflexiòn necesaria para evaluar el momento històrico que atraviesa la naciòn. (Imagen: Fuente externa).

La combinación del intenso activismo político y la Navidad ha generado un ambiente enrarecido y muy cargado para un fin de año en el país, lo que no es muy propicio para el momento festivo cristiano que amerita paz, amor, sosiego, moderación y reflexión a la hora de la toma de decisiones.

Los dimes y los direte, / No tienen tregua ni entalle. / Le dan con todo el birrete, / al por mayor y al detalle.

Por Cantaclaro

La hora del desenfreno,
un viejo aguinaldo dice.
Parranda y baile sin freno,
la moderación desdice.

No hay espacio en lo social.
Y tampoco en lo político.
¡Que viva lo antisocial...!,
aunque salte Periquito.

Los dimes y los direte,
no tienen tregua ni entalle.
Le dan con todo el birrete,
al por mayor y al detalle.

Que si Abel, Abinader o Leonel:
Chupe usted y déjeme el cabo...
Todos quieren al granel,
en el junte y el menoscabo.

Las encuestas y las rede,
nos tiene al coger el monte.
Pues si lo hacen adrede,
¿hay alguien que lo desmonte?

Que cese este vacilón,
aunque se espante la yegua.
Moderación, reflexión,
¡Hace falta ya una tregua…!