El viceministro cubano de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, junto a Phil Peters, fundador de FocusCuba, durante una conferencia en La Habana el 26 de octubre de 2022. (Foto: Cortesía de la Voz de América).
  • Los empresarios estadounidenses en La Habana representan una variedad de industrias, desde servicios de alimentos hasta compras en línea, transferencias digitales de dinero, envíos y finanzas, entre otros.
  • El gobierno demócrata de Biden ha flexibilizado algunas restricciones a Cuba relacionadas con remesas, el turismo y la migración, y además ha expresado interés en el sector privado.

La Habana, Cuba — Unas dos decenas de empresarios estadounidenses desafiaron las fuertes sanciones de Washington y la peor crisis económica de Cuba en décadas para participar el miércoles en una conferencia de negocios que incluye al nuevo sector privado local, buscando impulsar las inversiones entre los países.

La Cámara de Comercio de Cuba y la consultora FocusCuba, con sede en Washington, anfitrionas de la reunión, anunciaron un evento de tres días, el primero de este tipo desde al menos 2018, cuando el expresidente Donald Trump impuso nuevas sanciones añadidas al embargo comercial contra la isla.

Tanto la delegación cubana como la estadounidense han criticado las sanciones y han solicitado al presidente estadounidense, Joe Biden, que abandone las políticas de su predecesor republicano.

Antonio Luis Carricarte, presidente de la Cámara de Comercio de Cuba, describió el encuentro, con sede en el Hotel Nacional de La Habana, como un «día histórico».

Durante un breve deshielo en las relaciones bajo el expresidente Barack Obama, cientos de empresas estadounidenses aterrizaron en la isla para explorar oportunidades de negocios casi prohibidas actualmente en el país.

Desde compañías de cruceros hasta Western Union y Starwood Hotels firmaron acuerdos innovadores. Las nuevas sanciones los obligaron a retirarse.

El Gobierno comunista ha otorgado licencias a cubanos para operar cerca de 5.500 pequeñas y medianas empresas privadas durante el último año, por primera vez desde la revolución de Fidel Castro en 1959, al abrir nuevas opciones para asociaciones con inversionistas extranjeros.

«Casi todo lo que hacemos es con el nuevo sector privado en auge», dijo el cubano-estadounidense Hugo Cancio, cuya empresa Fuego, con sede en Miami, opera un mercado de alimentos en línea que procesa 4.000 pedidos diarios en Cuba. «Es importante que las empresas estadounidenses vean esto por sí mismas», añadió.

Los empresarios estadounidenses en La Habana representan una variedad de industrias, desde servicios de alimentos hasta compras en línea, transferencias digitales de dinero, envíos y finanzas, entre otros.

«Pienso que los participantes buscan claridad en términos de lo que es posible con la inversión del lado cubano en este nuevo sector privado, aunque cualquier acuerdo también debe ser aprobado por los reguladores estadounidenses», dijo a Reuters Phil Peters, fundador de FocusCuba.

La Casa Blanca no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre el tema.

El gobierno demócrata de Biden ha flexibilizado algunas restricciones a Cuba relacionadas con remesas, el turismo y la migración, y además ha expresado interés en el sector privado.