El presidente dominicano, Luis Abinader, hizo la advertencia en la Conferencia Anual del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), que se lleva a cabo en la sede la Organización de Estados Americanos (OEA), en la capital estadounidense. Dijo que el caso más reciente es el de Venezuela, que combina factores como la concentración del poder y la persecución de la oposición y los medios de comunicación”.
Washington, EEUU — El presidente de la República, Luis Abinader, proclamó en que la democracia en América Latina y el Caribe vive un momento crucial debido a “un preocupante deterioro en la calidad y el apoyo a los sistemas democráticos”.
El presidente dominicano hizo la advertencia en la Conferencia Anual del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), que se lleva a cabo en la sede la Organización de Estados Americanos (OEA), en la capital estadounidense.
“En las últimas décadas, hemos sido testigos de un preocupante deterioro en la calidad y el apoyo a los sistemas democráticos. De acuerdo a la reconocida encuestadora Latinobarómetro, solo el 48% de los latinoamericanos apoyaba la democracia como sistema de gobierno en 2023, una alarmante caída de 15 puntos desde 2010 cuando registró 63%. El estudio también señala un aumento de la indiferencia hacia el sistema político que pasó de 16% en 2010 a 28% en 2023, y un ligero aumento del apoyo al autoritarismo que pasó de 14% a 17%”, explicó.
El presidente Abinader dijo que “múltiples factores inciden en este declive, entre ellos, las secuelas de los frecuentes embates económicos globales desde finales de los años 90. Pero otro factor igualmente importante al que apunta el estudio de Latinobarómetro es que los ciudadanos no perciben los beneficios tangibles de la democracia.”
Agregó que “La encuesta también destaca entre las grandes preocupaciones el personalismo, la corrupción y la permanencia en el poder más allá de las reglas, todo esto unido al auge de actitudes populistas y autoritarias en la gobernanza, además de la pérdida de confianza en los partidos políticos que son vistos como instrumentos que facilitan todo lo anterior”.
Consideró que frente a ese panorama, “resulta imprescindible reflexionar sobre las tendencias que han contribuido a esta situación. Entre ellas, destaca la propensión a perpetuarse en el poder y la reelección indefinida, que en los últimos 30 años han ganado fuerza erosionando la democracia. El caso más reciente es el de Venezuela, que combina factores como la concentración del poder y la persecución de la oposición y los medios de comunicación”.
“Debemos reconocer que un principio esencial de la democracia es que el perdedor debe aceptar su derrota y ejercer una oposición leal y constructiva. De la misma forma, el ganador no debe avasallar ni doblegar al adversario. La democracia no puede ser ejercida únicamente por y para los ganadores. La mayoría debe garantizar el respeto y la inclusión de las minorías que gozan de iguales derechos y deben ser tratados con equidad y justicia”, significó.
Hizo saber la reforma constitucional que impulsa en el país para limitar a los presidentes que quieren reelegirse de forma indefinida, además del fortalecimiento de la seguridad y el crecimiento económico de la República Dominicana.
También tocó el tema haitiano, recalcando la inestabilidad en el vecino país que “ha generado una enorme presión sobre nuestra seguridad, y hemos enfatizado claramente que la comunidad internacional debe asumir un rol protagónico y sostenido en la estabilización de Haití”.
“República Dominicana está comprometida a liderar con el ejemplo, trabajando estrechamente con nuestros socios regionales e internacionales para construir un futuro de prosperidad compartida. Juntos, podemos crear un hemisferio más fuerte, más justo y más unido, donde el crecimiento económico beneficie a todos, donde la estabilidad sea el cimiento de nuestro progreso común y donde la democracia se profundice y fortalezca garantizando el respeto por las libertades y los derechos fundamentales de todos”, aseguró.