A días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos el 5 de noviembre, te explicamos 3 de los principales tipos de desinformación electoral que podrían enfrentar los votantes
Miami, EEUU — Los rumores infundados, teorías conspirativas, verdades a medias y frases que nunca fueron dichas por los candidatos son tácticas de desinformación recurrentes en el proceso electoral de Estados Unidos.
La manipulación informativa, aunque no es reciente, ha aumentado su alcance en la era digital. En parte, debido a la rapidez de difusión en las redes sociales, el desarrollo de la inteligencia artificial, la baja alfabetización mediática y la falta de filtros en el consumo de contenido.
Según el Centro de Monitoreo de Desinformación Electoral de NewsGuard, desde finales de agosto, se han identificado, en promedio, cerca de seis nuevas afirmaciones falsas sobre las elecciones por semana, así como 327 sitios que promueven este tipo de narrativas, informa nuestra aliada de medios, la Voz de América.
Un reporte de la UNESCO evidencia que cada proceso electoral, independientemente del país, presenta un conjunto de desinformaciones que podrían distorsionar de forma significativa la percepción pública y el resultado de las elecciones.
A continuación, presentamos tres tipos de desinformaciones a tener en cuenta camino a las elecciones en EEUU el 5 de noviembre.
1. Declaraciones que involucran a los candidatos
Esta táctica desinformativa ha sido una de las más empleadas en la campaña presidencial de Estados Unidos durante el 2024. Así lo evidencian informes de medios especializados en verificación como Chequeado y NewsGuard.
Las publicaciones más comunes se comparten como fotografías, videos o audios de los candidatos en redes sociales, aplicaciones de mensajería y sitios web. Estas historias pueden basarse en frases falsas, fuera de contexto o engañosas sobre temas polémicos como la inmigración, el derecho al aborto, la situación económica y los conflictos bélicos, entre otros.
También emplean figuras públicas o medios de comunicación reconocidos para difundir rumores infundados. Por ejemplo, han circulado narrativas erróneas sobre un supuesto respaldo de Taylor Swift al candidato republicano Donald Trump, así como imágenes falsas del actor Ryan Reynolds vistiendo una camiseta en apoyo a la demócrata Kamala Harris.
Otro elemento para considerar es el uso de la inteligencia artificial. El asistente de IA en X, conocido como Grok, ha sido el origen de innumerables desinformaciones este año, incluyendo imágenes de Trump y Harris en contextos violentos, románticos, sexualizados y más.
Incluso algunas narrativas provienen del propietario de la plataforma X, Elon Musk, quien amplifica la desinformación. Como ejemplo, promovió una falsa foto de Kamala Harris con un uniforme rojo y símbolos de la hoz y el martillo, y también ha impulsado contenido falso sobre inmigración.
2. Denuncias sobre un supuesto fraude electoral
Las denuncias de un supuesto fraude electoral orquestado por autoridades nacionales y locales, junto con informes de irregularidades en el proceso, han sido algunas de las principales estrategias desinformativas durante las elecciones en varios países, incluido Estados Unidos.
Una encuesta de NPR/PBS News/Marist del 3 de octubre señala que casi 6 de cada 10 estadounidenses dicen que les preocupa o les preocupa mucho que haya fraude electoral en estas elecciones. Esta cifra, según expertos, se debe a la insistencia falsa del candidato Donald Trump de que no se puede confiar en las elecciones.
Las irregularidades en el proceso electoral, pueden ser otro tipo de desinformación que sugiere un fraude organizado, como lo explica Chequeado en su Guía de ¿Cómo cubrir las noticias sobre elecciones sin promover la desinformación?
Mientras algunas irregularidades pueden ser ficticias, otras pueden ocurrir en procesos que involucran a millones de personas.
Por lo general, las irregularidades involuntarias no benefician a ningún partido, mientras que las intencionales tienden a favorecer a alguno de los contendientes.
“Sin embargo, existen mecanismos para analizar la transparencia de una elección y determinar si esas irregularidades son errores o manipulaciones intencionales. Un error durante las elecciones no es prueba de fraude”, explica Chequedo.
Un ejemplo de ello surgió en las elecciones de 2020 en EEUU, donde un análisis de la agencia AP revisó cada posible caso de fraude electoral en los seis estados en disputa por el expresidente Trump y encontró que había menos de 475, una cifra que no hacía diferencia en los resultados de las elecciones presidenciales en 2020.
3. Votación de personas no habilitadas
Con la inmigración en el centro de los debates por la Casa Blanca en 2024, han proliferado historias falsas o engañosas sobre el voto de estas minorías sin los requisitos legales necesarios.
Un análisis del International Center for Journalists (ICFJ), una organización dedicada a promover el periodismo de calidad en el mundo, ha calificado como la estrella de esta campaña a “la narrativa desinformante de que personas sin derecho a hacerlo votan o votarán”.
Algunos de los rumores falsos más difundidos incluyen: una nueva ley que permitiría a inmigrantes indocumentados votar en línea, así como la supuesta aprobación de un decreto por parte del gobierno estadounidense que posibilitaría la compra de residencia o ciudadanía a partir de septiembre.
Según el medio Factchequeado, las historias sobre personas que llegan al país “para registrarse irregularmente y votar” alimentan la percepción de que los inmigrantes están infringiendo las leyes electorales. Sin embargo, en muchos países, como EEUU, existen regulaciones estrictas que determinan quiénes son elegibles para votar.
Por otro lado, organizaciones como el Brennan Center for Justice, un instituto no partidista sobre política y derecho en EEUU, colaboran con varias entidades para dar seguimiento a los rumores sobre las elecciones e informar a los votantes de forma clara y veraz.
El Brennan Center analiza temas como las votaciones desde el extranjero, los requisitos para los trabajadores electorales, la precisión de los padrones, la seguridad del voto por correo, el funcionamiento de las máquinas de votación y la certificación de los resultados, entre otros.
Para apoyar a los votantes latinos también se han creado herramientas. Una de ellas es Electopedia, un sitio web que ofrece información detallada en español e inglés sobre las elecciones en Estados Unidos.
Otra opción es Electobot, un chatbot conversacional de WhatsApp que responde “dudas sobre el proceso electoral estadounidense y proporciona información verificada sobre los candidatos y sus declaraciones”, según Factchequeado.