José Miguel Vivanco subrayó que “Es fundamental redoblar la presión internacional para exigir la liberación de los presos políticos, y que se reestablezca la democracia en Nicaragua.” (Foto: Fuente externa).

Al menos 12 opositores fueron detenidos la noche del sábado, la víspera de las elecciones. Ya el gobierno de Daniel Ortega había encarcelado meses atrás una treintena de opositores, incluidos siete aspirantes presidenciales.

Miami, EE.UU.–José Miguel Vivanco, director de la división de las Américas de Human Rights Watch, calificó las elecciones presidenciales que se llevan a cabo en Nicaragua este domingo como “una farsa”.

Vivanco mencionó en un hilo en Twitter la detención arbitraria de 39 críticos del gobierno, entre ellos siete candidatos, y la falta de observación internacional o de prensa internacional en los comicios. “Es fundamental redoblar la presión internacional para exigir la liberación de los presos políticos, y que se reestablezca la democracia en Nicaragua”, indicó.

Detienen a 12 opositores la víspera de las elecciones
Al menos 12 opositores fueron detenidos la noche del sábado, la víspera de las elecciones. Ya el gobierno de Daniel Ortega había encarcelado meses atrás una treintena de opositores, incluidos siete aspirantes presidenciales.

Elecciones en Nicaragua, un vistazo desde la región
Las elecciones presidenciales en Nicaragua, a realizarse este domingo 7 de noviembre han recibido la repulsa y aceptación desde varios puntos del continente, con la insistencia por parte de organismos internacionales de que el gobierno del presidente Daniel Ortega ha dejado poco margen a la oposición para medir fuerzas.

El expresidente boliviano Evo Morales destacó “la convicción revolucionaria del pueblo nicaragüense” y deseó que los comicios se desarrollen de manera exitosa.
La periodista nicaragüense y corresponsal de la cadena Univisión, Tifani Roberts llamó a sus colegas que cubren las elecciones a mantener la seguridad en medio del caldeado ambiente electoral.

Esta semana el gobierno de Ortega negó la entrada de periodistas de algunos medios extranjeros que intentaron dar cobertura a los comicios. En tanto Sacha Llorenti, secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, destacó el trabajo del gobierno nicaragüense en temas sociales como el enfrentamiento a la pobreza y la sanidad como aspectos de los que no se hablan cuando se debate la situación democrática de Nicaragua.

La Federación Internacional por los derechos Humanos (FIDH) destacó en un seminario en línea las vías por las que la dupla Ortega-Murillo ha obstaculizado la democracia en el país.

La SIP pide a Nicaragua permitir labor de la prensa en comicios
Cuando faltan menos de 24 horas para el inicio de las elecciones generales en Nicaragua, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) instó al gobierno de Daniel Ortega a permitir el trabajo de medios de comunicación locales y corresponsales internacionales, y lo responsabilizó por “cualquier incidente” que ocurra al respecto.

En un comunicado, las autoridades de la SIP señalaron que el gobierno no autorizó el ingreso a Nicaragua de varios enviados de televisoras, radios, agencias de prensa y periódicos extranjeros, situación que, indicaron, exhibe “un grave retroceso” para la libertad de expresión en la nación centroamericana.

Ortega intensifica asedio a opositores y periodistas en víspera de elecciones
A tan solo un día de la realización de las elecciones presidenciales en Nicaragua, el Gobierno de Daniel Ortega, que busca un nuevo mandato en un proceso considerado viciado, según críticos, ha arreciado la persecución en contra de activistas y reporteros que se encuentran en el país centroamericano.

Desde el viernes por la noche se reportaron detenciones y allanamientos en varios puntos de Nicaragua. Tal es el caso del activista digital Yoel Sandino, detenido mientras salía de una actividad privada. Su madre Yamilet Ibarra manifestó en llantos que su hijo fue llevado a una estación policial, sin embargo no se le indicó las causas.

Varios reporteros que prefirieron no ser citados, denunciaron presencia de agentes policiales que llegaron a sus viviendas como una forma de “asedio”.