El ICFJ considera que la labor informativa ha adquirido enormes retos con entornos “hostiles” en diferentes partes del mundo que pueden ir desde riesgos a la integridad física de los comunicadores en el ejercicio de su profesión como la “estigmatización” del hacer periodístico. (Foto: Cortesía de la Voz de América).

El International Center for Journalists (ICFJ) entregó reconocimientos a periodistas de distintas latitudes del mundo por sus trabajo en entornos difíciles y por trayectorias. Los galardonados recibieron las preseas la noche del jueves en una ceremonia en la capital de Estados Unidos.

Washington, DC — El Internacional Center for Journalists, (ICFJ), entregó la noche de este jueves, en una ceremonia especial en Washington, tres reconocimientos a cinco periodistas procedentes de distintas latitudes del mundo, por considerar que en su trabajo “enfrentan desafíos sin precedentes” por lo que urge apoyarlos.

El fundador y director del medio de investigación salvadoreño El Faro, Carlos Dada, recogió uno de los premios “Tributo a periodistas 2022” junto a colegas de otros entornos distantes como el equipo de tres periodistas ucranianos, Evgeniy Maloletka, Vasilisa Stepanenko, Mstyslav Chernov, que tratan de mostrar al mundo -para The Associated Press– la realidad de su país invadido por Rusia.

La siguiente presea fue para la periodista Anisa Shaheed, quien dio cobertura para la estación de televisión TOLOnews en Afganistán hasta que la capital Kabul cayó en manos de los talibanes en 2021 y se generó la estampida de la gente tratando de huir por todas los medios posibles del país.

En la actualidad ella trabaja desde el exilio al carecer de espacio y de posibilidades de laborar en un país dominado por hombres y deteriorado luego de la vuelta del extremismo islamista al poder.

El director de El Faro, Carlos Dada dijo a la Voz de América que recibía este reconocimiento del ICFJ en nombre de los periodistas centroamericanos que enfrentan situaciones adversas por las distintas formas que afectan el libre ejercicio del periodismo en la región.

“Recibo este premio en nombre de todos los colegas centroamericanos que hoy la están pasando muy mal, que tienen menos visibilidad que nosotros (en El Faro) y que enfrentan acosos, amenazas y desafíos incluso mayores que nosotros, me siento muy honrado de recibirlo a nombre de toda esa gente y poder llamar la atención”, opinó Dada.

La organización considera que el trabajo de Dada al frente de El Faro, como primer medio de formato digital en América Latina generó “una fuerza líder para el periodismo independiente y de alta calidad en la región”.

El ICFJ considera que la labor informativa ha adquirido enormes retos con entornos “hostiles” en diferentes partes del mundo que pueden ir desde riesgos a la integridad física de los comunicadores en el ejercicio de su profesión como la “estigmatización” del hacer periodístico.

Ante esto el organismo de apoyo internacional a la libertad de prensa considera vital reforzar el reconocimiento y apoyar el desarrollo de un periodismo de calidad y comprometido como pieza clave en las democracias.

La presidenta del ICFJ, Sharon Moshavi dijo a la concurrencia en su disertación que el periodismo es vital para fortalecer la democracia porque el trabajo de todos los periodistas. «reporteros, editores y medios son esenciales para mantener vivas las democracias».

La organización considera que un «periodismo independiente y de calidad también lleva a proteger los derechos humanos» y por ende mantener una sociedad vibrante.

Carlos Dada aseguró en entrevista con VOA que las condiciones de presión contra el periodismo en Centroamérica lo ubican «en el peor momento», y el caso salvadoreño enumeró las condiciones que han llevado a muchos comunicadores a ser perseguidos.

Durante el evento se hizo mención especial a los periodistas encarcelados como el guatemalteco José Rubén Zamora, presidente de elPeriódico, arrestado en julio de este año y quien sigue encarcelado en el país centroamericano.

La ceremonia de premiación concluyó con un llamado a proteger al periodismo que en muchas regiones funciona en bajo amenazas o peligros extremos como explicaron los jóvenes periodistas ucranianos al recibir el reconocimiento arropados también por una ovación de la concurrencia.