- Durante tres días, los jefes de Estado y de Gobierno de las siete mayores economías del mundo se reúnen en el castillo de Elmau, a los pies de los Alpes.
- El tema principal será la guerra en Ucrania y reiterar su apoyo al presidente Zelenski, quien participará por la vía telemática.
Baviera, Alemania — Los jefes de Estado y de Gobierno del G7 dieron inicio este domingo a la reunión cumbre de tres días que se lleva a cabo en el castillo de Elmau, a los pies de los Alpes, en el estado alemán de Baviera, con el tema de la guerra de Ucrania como epicentro de los debates.
Alemania es, desde hoy y hasta el 28 de junio, la anfitriona de la cumbre. Por ello, el canciller alemán, Olaf Scholz, se ha reunido con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en un encuentro bilateral antes de que se inicie la reunión conjunta.
No obstante, la guerra en Ucrania se erige como el tema principal de dicha cumbre. El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha incidido en esta materia este sábado, al reiterar en un comunicado de prensa el apoyo a Ucrania «el tiempo que sea necesario».
El lugar elegido para este encuentro es un hotel de lujo en una zona rural, con el objetivo de evitar los problemas de la cumbre del G20 en Hamburgo en 2017, en el que se registraron graves disturbios y enfrentamientos. Los alrededores de Elmau cuentan, a su vez, con unas vallas que impiden el acceso a posibles manifestantes, además de una gran organización policial, con alrededor de 18.000 agentes.
El Grupo de los Siete es un foro con las mayores economías: Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido. El objetivo es coordinar los temas económicos y de seguridad que atañen a las potencias. Asimismo, la cumbre cuenta con la presencia telemática del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski.
Protestas
Este sábado, víspera de la cumbre, unas 4.000 personas se daban cita este sábado en una protesta contra la reunión del G7 para reivindicar la eliminación gradual de los combustibles fósiles, la protección de la diversidad animal y vegetal, la justicia social y la acción contra el hambre.
La protesta quedaba descafeinada ya que los organizadores contaban con una asistencia de alrededor de 20.000 personas.