El ataque de un grupo presuntamente neofascista contra un periodista del diario La Stampa, en Italia, ha despertado una ola de repudio en todo el espectro político del país. El comunicador decidió filmar un evento callejero de la agrupación y recibió una golpiza que lo envío al hospital
Roma, Italia — Políticos italianos, incluida la primera ministra Giorgia Meloni, expresaron su indignación el domingo después de que presuntos neofascistas golpearan a un periodista en la ciudad norteña de Turín.
El sábado por la noche, el periodista del diario La Stampa se topó por casualidad con una fiesta del grupo marginal neofascista CasaPound, en la que había bombas de humo y fuegos artificiales. Comenzó a filmar con su teléfono.
Según sus imágenes y un relato del periódico, un grupo de hombres se le acercó y le preguntó: «¿Eres uno de nosotros?». Luego lo atacaron, lo que provocó que requiriera tratamiento hospitalario, informa nuestra aliada de medios, la Voz de América.
Meloni, líder del partido de extrema derecha Hermanos de Italia, se solidarizó con el periodista Andrea Joly por el «ataque inaceptable».
Fue «un acto de violencia que condenó enérgicamente y espero que los responsables sean identificados lo antes posible», dijo en un comunicado.
Elly Schlein, líder del opositor Partido Demócrata de centro izquierda, también se solidarizó con Joly y condenó un «clima de impunidad».
«¿Qué más esperamos antes de que las organizaciones neofascistas sean disueltas, como dice la Constitución?», preguntó ella.
El ataque fue uno de los dos incidentes de violencia aleatoria que aparecieron en los titulares este fin de semana en Italia, después de que apareciera un impactante vídeo de dos hombres homosexuales siendo golpeados por tres hombres y una mujer en Roma.
Ese ataque también provocó la condena de todo el espectro político.
El ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, deploró el domingo «demasiada violencia e intolerancia en Italia contra quienes no piensan como usted», escribiendo en X, antiguo Twitter, que «condena enérgicamente cualquier violencia».