Zbigniew Rau, quien es el ministro de Relaciones Exteriores de Polonia, se dirigió al Consejo de Seguridad de la ONU el lunes, en su calidad de presidente en ejercicio de la OSCE para 2022. (Foto: Cortesía de la Voz de América).

El canciller polaco, Zbigniew Rau, dijo que los ataques a hospitales, escuelas y centros civiles en Ucrania son «terrorismo de estado». Rusia dijo que la OSCE había elegido un bando en el conflicto.

Naciones Unidas, Nueva York — El presidente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Zbigniew Rau, dijo el lunes que los ataques de Rusia contra civiles ucranianos, así como contra escuelas y hospitales, son «terrorismo de estado».

“La fuerza invasora comenzó a atacar a la población civil y la infraestructura en un intento de quebrantar el espíritu del pueblo ucraniano”, dijo Rau.

Subrayó que «Esto es deplorable y vergonzoso y equivale a terrorismo de Estado. Las escuelas, los hospitales y los jardines de infancia están siendo atacados deliberadamente con armas prohibidas internacionalmente».

Naciones Unidas ha dicho que tiene informes creíbles de que las fuerzas rusas están utilizando municiones en racimo en áreas pobladas.

Rau, quien es el ministro de Relaciones Exteriores de Polonia, se dirigió al Consejo de Seguridad de la ONU el lunes, en su calidad de presidente en ejercicio de la OSCE para 2022.

Rusia es miembro de la OSCE, y Rau dijo que Moscú lo acusó de parcialidad en su respuesta al conflicto.

«Solo tengo una respuesta a este tipo de acusación: la imparcialidad termina donde comienzan las flagrantes violaciones del derecho internacional humanitario», dijo.

Rau instó a Rusia y Bielorrusia, que alberga tropas rusas en su territorio y ha sido acusada de permitir que se disparen misiles desde su suelo, a detener este «esfuerzo cruel».

«La puerta a la diplomacia aún está abierta y pido a Rusia que participe en un diálogo significativo y sustancial para buscar una solución pacífica a la crisis actual», expresó Rau.

Rau dijo que espera que Moscú cumpla con sus obligaciones y compromisos internacionales y agregó que cualquier solución política sostenible «debe respetar plenamente la soberanía, la integridad territorial y la independencia de Ucrania dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente».

El enviado de Rusia desestimó la oferta de diplomacia del presidente de la OSCE, diciendo que había elegido un bando en el conflicto y, por lo tanto, no era un intermediario honesto.

“El objetivo del trabajo del presidente en ejercicio es precisamente resolver los desacuerdos entre los estados participantes y acercar posiciones; de ninguna manera es tomar medidas sesgadas que inflaman aún más la confrontación, y especialmente no encabezar una campaña anti-rusa en la OSCE», dijo al Consejo el embajador ruso, Vassily Nebenzia.