ARCHIVO: Una pantalla de televisión en Seúl, Corea del Sur, muestra la foto del soldado estadounidense Travis King, quien cruzó la frontera hacia Corea del Norte el 16 de agosto de 2023.

Un funcionario dijo que el soldado estadounidense Travis King, quien cruzó la frontera hacia Corea del Norte en julio, fue transferido desde China y entregado a las autoridades de EEUU

Seúl, Corea del Sur — El soldado estadounidense Travis King, que cruzó a Corea del Norte hace dos meses, está bajo custodia de Estados Unidos, según dijeron este miércoles dos funcionarios estadounidenses que hablaron bajo condición de anonimato antes de un anuncio oficial.

Un funcionario dijo que King fue transferido desde China. Anteriormente, Corea del Norte dijo que expulsaría a King, de 23 años, algo que sorprendió a algunos observadores que esperaban que Pyongyang prolongara su detención con la esperanza de obtener concesiones de Washington en un momento de altas tensiones entre los rivales.

Aunque la expulsión de King resuelve un episodio aún misterioso, es casi seguro que no pone fin a sus problemas ni garantiza el tipo de celebración de regreso a casa que ha acompañado la liberación de otros estadounidenses detenidos.

Su destino sigue siendo incierto, ya que el gobierno de Estados Unidos lo ha declarado ausente sin permiso. Eso puede significar castigo con prisión militar, pérdida de salario o baja deshonrosa.

King, que había servido en Corea del Sur, corrió hacia Corea del Norte cuando hacía una gira civil por una aldea fronteriza el 18 de julio, para convertirse en el primer estadounidense confirmado detenido en el Norte en casi cinco años, informa la Voz de América.

En el momento en que cruzó la frontera, se suponía que King se dirigía a Fort Bliss, Texas, después de haber sido liberado de prisión en Corea del Sur tras una condena por agresión.

Este miércoles, la agencia de noticias oficialista de Corea del Norte, KCNA, informó que las autoridades habían terminado el interrogatorio de King. Dijo que confesó haber entrado ilegalmente al Norte porque albergaba “resentimientos contra el maltrato inhumano y la discriminación racial” dentro del ejército estadounidense y estaba “desilusionado por la sociedad estadounidense desigual”.

KCNA ya había atribuido comentarios similares a King antes y verificar su autenticidad es imposible.

En una entrevista el mes pasado con AP, la madre de King, Claudine Gates, dijo que su hijo tenía motivos para querer volver a casa.

“Simplemente no puedo imaginarlo queriendo en Corea cuando tiene familia en Estados Unidos. Tiene muchas razones para volver a casa”, dijo.

King, que es de Wisconsin, estaba entre los aproximadamente 28.000 soldados estadounidenses estacionados en Corea del Sur como disuasión contra una posible agresión de Corea del Norte.

Los funcionarios estadounidenses habían expresado su preocupación por el bienestar de King, citando el duro trato que Corea del Norte había dado a algunos detenidos estadounidenses en el pasado.

s cruces no autorizados a través de la Zona Desmilitarizada que separa las Coreas son extremadamente raros. Los pocos estadounidenses que cruzaron a Corea del Norte en el pasado han sido soldados, misioneros, defensores de los derechos humanos o algunos que simplemente sentían curiosidad por una de las sociedades más enclaustradas del mundo.

La decisión de Corea del Norte de liberar a King después de 71 días parece relativamente rápida para las normas del país, especialmente considerando las tensiones entre Washington y Pyongyang por el creciente programa de armas nucleares y misiles del Norte y el aumento de los ejercicios militares de EEUU con Corea del Sur.

Algunos habían hecho conjeturas de que Corea del Norte podría tratar a King como un activo de propaganda o moneda de cambio.

Al final, aparentemente Corea del Norte concluyó que simplemente no valía la pena conservar a King, posiblemente debido al costo de proporcionarle comida y alojamiento, y asignarle guardias y traductores cuando nunca iba a ser una fuente significativa de inteligencia militar estadounidense, dijo Cheong Seong-Chang, analista del Instituto Sejong de Corea del Sur.

Los estadounidenses cautivos han sido trasladados en avión a China anteriormente. En otros casos, se ha enviado un enlace para recuperarlos.

Eso sucedió en 2017, cuando Corea del Norte deportó a Otto Warmbier, un estudiante universitario estadounidense que estaba en coma en el momento de su liberación y luego murió.