Tras la muerte del renombrado pintor del periodo del Alto Renacimiento, Rafael Sanzio, los Museos Vaticanos han devuelto los tapices que diseñó a su lugar original.
Roma, Italia (ACI Prensa)–“El valor de estos tapices es sobre todo el hecho de que completan el mensaje religioso de la Capilla Sixtina”, dijo el 17 de febrero a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– Alessandra Rodolfo, la curadora de la exposición.
Los diez tapices muestran escenas de las vidas de San Pedro y San Pablo en los Evangelios y los Hechos de los Apóstoles, y fueron encargados por el Papa León X en 1515. Rafael hizo bocetos a tamaño real para su diseño. Los tapices fueron completados por un influyente tejedor de tapices flamenco, Pieter van Aelst, en su estudio en Bruselas.
Las obras se exhibirán en la Capilla Sixtina del 17 al 23 de febrero. Luego regresarán a la Sala Rafael en el área de la Pinacoteca de los Museos Vaticanos, donde han estado colgadas desde 1932, dijo Rodolfo.
Los tapices se hicieron para acompañar los frescos de Miguel Ángel en el techo de la Capilla Sixtina, que se terminaron en 1512, así como los frescos renacentistas ligeramente anteriores que representan la vida de Moisés y de Cristo en las paredes de la capilla. Cuelgan en la parte inferior de las paredes, pintadas para que parezcan cortinas.
Los tapices llegaron al Vaticano entre 1519 y 1521. El propio Rafael, quien murió en 1520, no vivió para verlos todos terminados. “Rafael, junto con León X, concibió el proyecto iconográfico de los tapices”, dijo Barbara Jatta, directora de los Museos Vaticanos, y añadió que las obras están inspiradas en los apóstoles que traen el Evangelio al mundo.
Agrega que “Entonces, en este lugar que es un lugar universal de arte y fe, tenemos, increíblemente, también el Evangelio dado a la gente. Gracias a Rafael, gracias a León X”.
“Rafael representa de alguna manera el más alto ejemplo del arte renacentista. A través de él queremos compartir los valores, no solo del arte, sino también de la fe que su arte representa, especialmente en sus tapices de la Capilla Sixtina”, explicó Jatta.
Los diez tapices fueron tomados durante el saqueo de Roma en 1527. Los que no fueron quemados terminaron diseminados por toda Europa, sin embargo, finalmente fueron llevados a Roma y al Vaticano.
Con alrededor de 54 kilogramos, y cubriendo una longitud de más de 30 metros, se necesitó “un gran esfuerzo” para colgar los tapices, dijo Rodolfo. Esta exhibición es una de las varias que tendrán lugar en Roma en 2020 por el 500 aniversario de la muerte de Rafael. (Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA).