El plan es parte de la Administración Trump para garantizar recursos en toda la nación durante la fase de reapertura.
Washington, D.C.–El Departamento de Salud y Servicios Humanos, (HHS), está entregando US$11 mil millones en nuevos fondos para apoyar las pruebas para COVID-19.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) proporcionarán US$10.25 mil millones a los estados, territorios y jurisdicciones locales a través del acuerdo cooperativo de Epidemiología y Laboratorio para la Prevención y Control de Enfermedades Infecciosas Emergentes (ELC).
El Servicio de Salud Indígena (IHS) proporcionará US$750 millones a los programas de Salud Indígena de IHS, tribales y urbanos para ampliar la capacidad de prueba y las actividades relacionadas con la prueba.
Se anunciará una metodología detallada de asignación y distribución para los fondos de IHS en los próximos días.
Este financiamiento es parte del esfuerzo más amplio de la Administración Trump para garantizar que los estados, territorios y tribus tengan los recursos necesarios para cumplir con sus objetivos de prueba a medida que comienzan a reabrir.
El Programa de protección de cheques de pago y la Ley de mejora de la atención médica proporcionará apoyo crítico para desarrollar, comprar, administrar, procesar y analizar las pruebas COVID-19, realizar vigilancia, rastrear contactos y actividades relacionadas. Estos fondos, junto con el apoyo financiero previo que proporcionaron los CDC y IHS, ayudarán a los estados, tribus y territorios en sus esfuerzos por reabrir América.
«Este financiamiento asegurado por el presidente Trump para actividades de salud pública locales, tribales y estatales es una inversión histórica en la capacidad de Estados Unidos para rastrear y controlar la propagación del virus, que es esencial para una reapertura segura», dijo el secretario del HHS Alex Azar.
Añadió que “Por el bien de la salud y el bienestar de todos los estadounidenses, debemos ayudar a los estadounidenses a regresar de manera segura al trabajo y la escuela, y eso requiere una expansión continua de las pruebas, la vigilancia y el seguimiento de contactos. La Administración Trump está lista para apoyar y guiar a los estados en su trabajo que salva vidas para combatir el virus y reabrir nuestro país.»
«A medida que la nación comienza con cautela el enfoque gradual para la reapertura, esta inversión considerable en la expansión de la capacidad de pruebas y rastreo de contactos para estados, localidades, territorios y comunidades tribales es esencial», dijo el director de los CDC, doctor Robert R. Redfield, tras reiterar la necesidad de mantener distanciamiento social, lavado de manos y coberturas faciales. “No estamos indefensos en la batalla contra esta pandemia.»
En tanto, el Director de IHS, Contralmirante Michael Weahkee, señaló que «estos recursos ampliarán en gran medida la capacidad de prueba en las instalaciones de organizaciones indias federales, tribales y urbanas en todo el sistema de salud indio. Las pruebas son críticas para nuestra respuesta de salud pública mientras trabajamos para vencer esta pandemia.»
Cada Gobernador o persona designada de cada Estado, localidad, territorio, tribu u organización tribal que reciba fondos deberá presentar al HHS su plan para la prueba COVID-19, incluidas las metas para el resto del año calendario 2020, que incluye:
• Número de pruebas necesarias, mes a mes para incluir pruebas de diagnóstico, serológicas y de otro tipo, según corresponda
• Estimaciones mensuales de la capacidad de laboratorio y pruebas, incluidas las relacionadas con la fuerza laboral, el equipo y los suministros, y las pruebas disponibles.
• Descripción de cómo se utilizarán los recursos para las pruebas, incluida la flexibilización de las políticas comunitarias de mitigación de COVID-19
Las jurisdicciones utilizarán los fondos que reciben para cumplir con los objetivos de prueba establecidos en sus planes de prueba COVID-19, incluida la compra de suministros (como kits de prueba y otros suministros de prueba, según sea necesario).