OIT dice tripulantes deben ser calificados como “trabajadores esenciales” y regresar a sus hogares con seguridad.
Ginebra, Suiza–La Organización Internacional del Trabajo, (OIT), formuló un llamado urgente para adoptar medidas coordinadas que permitan liberar a entre 150.000 y 200.000 marineros que ha quedado atrapados a bordo de buques en distintos lugares del mundo a causa de las medidas de contención de la propagación del virus de la COVID-19.
La OIT ha instado a los gobiernos y las autoridades competentes en migración, salud y asuntos marítimos a trabajar juntos para reconocer a la gente de mar como “trabajadores esenciales” que durante la pandemia velan por la fluidez comercial y la circulación de suministros médicos vitales, equipos de seguridad, alimentos y otros bienes cruciales.
La OIT se ha remitido a lo dispuesto en el Convenio sobre el trabajo marítimo, 2006, y ha pedido a los gobiernos que adopten sin demora todas las medidas posibles para facilitar la rotación y la repatriación de la tripulación, prestando atención a la necesidad de reducir al mínimo el riesgo de contagio.
A finales de abril la OIT ya advirtió sobre la situación desesperada de los marinos a los que se negaba autorización para abandonar las embarcaciones; sin embargo, más de un mes después, la situación sigue atascada y, según la OIT, cada día se deteriora más.
Muchos de los trabajadores a bordo completaron su periodo de servicio hace más de cuatro meses, pero la crisis obligó a prolongar excepcionalmente sus contratos.
Según se informa, muchos de ellos están en condición precaria, ahora presentan problemas de salud mental y agotamiento físico, por lo que empieza a verse mermada su capacidad para realizar su trabajo con la seguridad necesaria para la navegación comercial.