El senador Robert Menéndez se sentará en el banquillo de los acusados el 6 de mayo en una corte federal en Manhattan para responder a cargos de soborno imputados por el Departamento de Justicia.
Su esposa, quien se encuentra «grave» de salud, enfrentaría juicio a inicios de julio.
Nueva York, Estados Unidos. —El senador federal Bob Menéndez y su esposa serán juzgados por separado en torno a las acusaciones de que participaron en un ardid de sobornos, decidió un juez, después de que los abogados de Nadine Menéndez argumentaron que ella requiere de un tratamiento por un grave problema de salud.
El juicio del demócrata por Nueva Jersey seguirá programado para el 6 de mayo en un tribunal federal de Manhattan, mientras que el proceso de Nadine Menéndez fue aplazado tentativamente para el 8 de julio.
“Este juicio proseguirá sin la señora Menendez” a fin de “darle algo de estabilidad y certidumbre a todas las partes”, dijo el juez Sidney Stein. “El gobierno va a tener que juzgar este caso dos veces”.
Conforme a nuestra aliada de medios, la Voz de América, los abogados de Nadine Menendez presentaron la solicitud en una carta dirigida a Stein esta semana, en la que señalaban que la acusada fue diagnosticada recientemente con un padecimiento no específico que requiere cirugía en las próximas de cuatro a seis semanas.
El jueves en el tribunal, argumentaron que necesita más tiempo para someterse a análisis a fin de comprender la naturaleza de su padecimiento.
Un abogado del senador instó al juez a no postergar el proceso contra su cliente debido a esta situación, asegurando que las acusaciones son una “sombra” que pende sobre el expresidente de la influyente Comisión de Asuntos Exteriores del Senado y “prácticamente elimina su capacidad para postularse” a la reelección este año.
“El senador Menendez quiere su juicio el 6 de mayo”, declaró Adam Fee. “Ejercemos nuestro derecho a un juicio expedito”.
En tanto, la fiscalía arguyó que todo el juicio debería aplazarse, y dijo en una misiva dirigida al juez que retirar a Nadine Menendez del juicio de su esposo resultaría en “ineficiencias e injusticias graves” que requerirían que se llame nuevamente a decenas de testigos a declarar.
“Estamos listos para llevar este caso a juicio. Queremos llevar este caso a juicio”, dijo el asistente del fiscal federal Daniel Richental en la corte. “No queremos llevar este caso a juicio dos veces”.