Según las autoridades, la banda se dedicaba al tráfico de migrantes. De acuerdo con la Policía, la banda preparaba a los migrantes para hacerse pasar como misioneros religiosos o miembros de la comunidad LGBTIQ que buscaban refugio por discriminación y violencia en Colombia con el objetivo de engañar a los funcionarios de migración
Bogotá, Colombia — Las autoridades colombianas capturaron y procesaron a tres personas señaladas de participar en una banda dedicada al tráfico de migrantes y al fraude de documentos para obtener visas de Estados Unidos.
La Fiscalía señaló el miércoles en un comunicado que los capturados serían integrantes de la banda “Los Hunters”, dedicados a falsificar historias clínicas y otros documentos que simulaban enfermedades de alto costo que requerían un tratamiento médico urgente en Estados Unidos y así lograr adelantar citas en la embajada americana que estaban agendadas para 2027.
Las capturas se realizaron en Bogotá y Antioquia, al noroeste del país, y los detenidos fueron imputados de los delitos de tráfico de migrantes, enriquecimiento ilícito y falsedad en documento privado, que tienen prevista penas de hasta 15 años de prisión en Colombia.
Los detenidos fueron identificados como Maiker Enrique Villa Mesa y Luz Dary León Gallego aceptaron los cargos mientras Clara de las Mercedes Yépez se declaró inocente, informa la Voz de América.
Un juez ordenó a los tres capturados una medida de aseguramiento en su residencia para enfrentar el proceso judicial.
El fraude de documentos, por un costo de hasta 3.000 dólares, incluía extractos bancarios y certificaciones financieras que hacían creer que los solicitantes de visa tenían la capacidad económica necesaria para financiar su tratamiento médico, lo que habría “inducido en error a los funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Colombia, que aprobaban las visas”, detalló la Fiscalía.
En algunos casos en los que la visa fue negada la banda habría gestionado el traslado de los migrantes de manera irregular hasta la ciudad mexicana de Tijuana, fronteriza con Estados Unidos, donde eran entregados a “coyotes” para pasar la frontera por un costo de 5.000 dólares.
De acuerdo con la policía, la banda preparaba a los migrantes para hacerse pasar como misioneros religiosos o miembros de la comunidad LGBTIQ que buscaban refugio por discriminación y violencia en Colombia con el objetivo de engañar a los funcionarios de migración.
La banda no sólo ofrecía documentos falsos en el trámite de la visa, también una residencia a personas en condición de irregularidad en Estados Unidos por medio de un supuesto funcionario del consulado americano, un servicio por el que cobraban hasta 20.000 dólares.