Desde la década de 1980, el Servicio de Alguaciles de EE. UU. ha combinado sus recursos y experiencia con agencias locales, estatales y federales para encontrar y detener a fugitivos peligrosos. (Foto: Fuente externa).

Este ciudadano de origen hondureño, conspiró en contubernio con políticos y miembros de las Fuerzas Militares de su país para operar un laboratorio clandestino de cocaína, de acuerdo sostienen las autoridades de los Estados Unidos.

Miami, Florida. – La Justicia de los Estados Unidos condenó a cadena perpetua, al ciudadano hondureño Geovanny Fuentes Ramírez, acusado de narcotráfico internacional en alianza con fuerzas militares de su país, el cual deberá entregar US$151,7 millones por la distribución de toneladas de cocaína y delitos relacionados con armas, conforme expediente en su contra.

De acuerdo con el Departamento de Justicia, «Fuentes Ramírez conspiró con políticos de alto nivel hondureños y miembros de las fuerzas militares y la Policía Nacional de Honduras para operar un laboratorio de cocaína en Honduras y distribuir esta sustancia por rutas aéreas y marítimas.»

Damian Williams, fiscal federal de Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, hizo el importante anuncio, mientras que un jurado condenó a Fuentes Ramírez en marzo de 2021 tras un proceso que se extendió durante dos semanas. La pena la estableció el honorable P. Kevin Castel, quien además presidió el proceso.

El fiscal federal Damian Williams señaló al respecto del caso que,  “Geovanny Fuentes Ramírez fue condenado por la importación de toneladas de cocaína a Estados Unidos y por proteger su negocio ilícito de estupefacientes con ametralladoras.»

«En la consumación de los delitos relacionados con narcóticos, Fuentes Ramírez sobornó a altos funcionarios hondureños y fue responsable de actos feroces de violencia y homicidio. El camino de destrucción que marcó este imputado, tanto en términos de violencia como al colmar de cocaína a Estados Unidos, ha concluido finalmente y ahora pasará el resto de su vida en una cárcel federal.»

«A partir de 2009 o aproximadamente en esa fecha, el acusado y otras personas establecieron y administraron un laboratorio de cocaína en el departamento hondureño de Cortés, donde producían cientos de kilos de cocaína cada mes.»

Fuentes Ramírez, colaboró con otras personas para recibir cargamentos de cocaína enviados a Honduras por vía aérea y marítima, y para transportar la cocaína que producía en el laboratorio. Brindó también seguridad a la instalación y para el transporte de cocaína utilizando guardias fuertemente armados y personal policial y militar hondureño.»

Se indica en el expediente que, «en varias ocasiones entre aproximadamente 2010 y 2013, este ayudó a coordinar o participó directamente en hechos de violencia relacionados con drogas.»

«En 2012 o aproximadamente en esa fecha, por ejemplo, después de que el laboratorio de cocaína, el imputado fue allanado por las fuerzas de aplicación de la ley, Fuentes Ramírez, golpeó y torturó a un agente de aplicación de la ley por creer que estaba implicado en la investigación del laboratorio.»

Mientra que, «asesinó al agente disparándole en la cabeza, en un acto que describió como tiros de gracia. También amplió su actividad de narcotráfico sobornando a altos funcionarios públicos hondureños», señala el Departamento de Justicia de los Estados Unidos. Además de la pena de prisión, Fuentes Ramírez, de 52 años, fue condenado a cinco años de libertad vigilada.

Williams elogió los encomiables esfuerzos de la Unidad de Investigaciones Bilaterales de la División de Operaciones Especiales de la DEA, la Fuerza de Choque de Nueva York y la Oficina Nacional en Tegucigalpa, así como de la Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

Este proceso penal forma parte de un operativo del Grupo de Tareas contra la Narcodelincuencia Organizada (Organized Crime Drug Enforcement Task Forces, OCDETF).

El OCDETF identifica, desactiva y desmantela a las organizaciones delictivas de más alto nivel que amenazan a Estados Unidos empleando una estrategia en la que participan múltiples agencias gubernamentales y que se apoya en el trabajo de los fiscales y las tareas de inteligencia. Se puede consultar más información sobre el Programa OCDETF en https://www.justice.gov/OCDETF.

Este caso está siendo manejado por la Unidad de Seguridad Nacional y Narcóticos Internacionales de la Fiscalía.