En noviembre, más de una docena de artistas, activistas y periodistas fueron sitiados por el Ministerio del Interior, (MININT), en una casa en el barrio habanero de San Isidro.

El capítulo de la isla incluido en el Informe de Medio Año de la Sociedad Interamericana de Prensa concluye que el gobierno de Cuba continúa reprimiendo a la prensa independiente.

Miami, Florida–En este período se mantuvo en Cuba la férrea censura y la restricción de protestas civiles y grupos críticos al régimen; mientras que los periodistas independientes fueron víctimas de acoso a través de redes sociales a los que se vilipendió por estar al servicio del gobierno estadunidense, según el informe de la Sociedad Interamericana de Prensa, (SIP,) sobre la libertad de prensa, presentado en su Reunión de Medio Año, celebrada del 20 al 23 de abril.

La organización hemisférica también emitió una resolución que será enviada al gobierno y a organismos intergubernamentales.

Informe:
El manotazo dado por el ministro de Cultura a los periodistas independientes simboliza la relación del Estado con la libertad de prensa en estos seis meses, marcados por protestas, actos de repudio, campañas televisivas contra la sociedad civil, y un descontento generalizado por la crisis económica cada vez más aguda.

En noviembre, más de una docena de artistas, activistas y periodistas fueron sitiados por el Ministerio del Interior (MININT) en una casa en el barrio habanero de San Isidro, y algunos de ellos –como los periodistas Iliana Hernández y Esteban Rodríguez -se declararon en huelga de hambre. La protesta terminó cuando agentes del MININT, disfrazados de médicos, irrumpieron en la vivienda y los sacaron con el pretexto de proteger su salud, al haber entre ellos un periodista, Carlos Manuel Álvarez, llegado desde el extranjero que no había cumplido parte del protocolo de la Covid-19.

El operativo de desalojo coincidió con el primer corte nacional de todos los servicios de internet, cuyo fin fue impedir la divulgación del ataque a la vivienda.

Luego más de 300 personas protestaron frente al Ministerio de Cultura por el cese la represión a los artistas independientes, siendo la manifestación más numerosa en más de sesenta años. La protesta se autodisolvió en la madrugada, al mismo tiempo que se cerraba un enorme dispositivo de represión formado por civiles y agentes del Ministerio del Interior.

Desde entonces, el régimen lanzó una campaña de desprestigio desde redes sociales, prensa escrita y del Noticiero Nacional de Televisión, exponiendo los líderes y atacándolos con intervalos, como Iliana Hernández, Carlos Manuel Álvarez, Mauricio Mendoza y Nelson Álvarez Mairata.

Los ataques se extendieron a los medios para los que trabajan. La difamación a los periodistas estuvo centrada en la subordinación a las órdenes del gobierno estadounidense, un viejo recurso del régimen cubano para perseguir a todos los que le molestan.

El 27 de enero, al cumplirse dos meses de la protesta frente al Ministerio de Cultura, siete periodistas independientes acudieron al mismo lugar para reportar la reunión de un pequeño grupo de artistas, pero la concentración fue cortada por el propio Alpidio Alonso, ministro de Cultura, quien salió a la calle y agredió al periodista que lo filmaba, Mauricio Mendoza. Luego, funcionarios y agentes de civil empujaron y detuvieron a los periodistas.

El panorama legal sigue siendo restrictivo contra el ejercicio de las libertades de prensa, expresión e información, por el absoluto control de la policía política sobre el aparato judicial, y la existencia de un marco jurídico general encaminado a silenciar a los ciudadanos críticos.

En el periodo, además, se ha destacado el uso del monopolio estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, SA (ETECSA), como brazo ejecutor de la Seguridad del Estado en materia de silenciamiento de periodistas independientes, a partir de suspensión del servicio de internet y telefonía a determinados periodistas durante periodos de tiempo variables, entre otros hechos de preocupación en este período.

Calce foto 1.- En noviembre, más de una docena de artistas, activistas y periodistas fueron sitiados por el Ministerio del Interior, (MININT), en una casa en el barrio habanero de San Isidro.

Ver informe completo en el siguiente enlace:

https://www.sipiapa.org/notas/1214467-cuba