El asesor de seguridad nacional estadounidense, Jake Sullivan, agregó que la administración del presidente Joe Biden ha pedido a ambos países que trabajen juntos para "encontrar una solución a esta disputa diplomática". (Foto: Fuente externa).

La Casa Blanca prorroga un decreto que declara a Venezuela como una “extraordinaria amenaza” a la seguridad nacional, al considerar que el gobierno de Nicolás Maduro continúa cometiendo violaciones a la democracia y los derechos humanos

Washington, EEUU — El gobierno de Estados Unidos extendió este martes la declaración de “emergencia nacional” sobre Venezuela, adoptada en 2015 por el entonces presidente Barack Obama a través de la orden ejecutiva 13692.

La decisión de extender un año más la declaración de emergencia se da porque la situación en Venezuela “no ha mejorado” y “continúa representando una inusual y extraordinaria amenaza a la seguridad nacional y a la política exterior de Estados Unidos”, según explicó la Casa Blanca en un comunicado.

Desde que se declaró la emergencia nacional con respecto a Venezuela en 2015, el gobierno estadounidense la ha renovado sistemáticamente cada año, informa nuestra emisora aliada la Voz de América.

La Casa Blanca volvió a señalar la “erosión de las garantías de los derechos humanos, la persecución de los opositores políticos (…) y la reducción de la libertad de prensa” entre las circunstancias que se dan en el país y que llevan a Washington a considerar que existe una situación de emergencia.

La declaración de una “emergencia nacional” es una herramienta con la que cuenta el presidente de EEUU para aplicar sanciones contra un país bajo determinadas circunstancias, y que le permite ir más allá de lo aprobado por el Congreso.

Desde 2015, Estados Unidos ha emitido decenas de sanciones hacia Venezuela, entre ellas contra el presidente Nicolás Maduro y su círculo de allegados políticos y familiares y hacia PDVSA, la empresa petrolera estatal venezolana.

Maduro ha calificado a la sanciones de “terrorismo económico” hacia Venezuela y su gobierno denunció a Washington ante la Corte Penal Internacional por sus políticas, asegurando que son un crimen de lesa humanidad.

En los últimos tiempos, Washington y Caracas habían llevado a cabo un acercamiento que llevó a la flexibilización de algunas sanciones sobre el sector petrolero y a la liberación de diversos presos por ambas partes.

Sin embargo, en las últimas semanas la situación se ha estancado a raíz de lo que la oposición venezolana ha calificado como violaciones de los Acuerdos de Barbados, entre ellos, la inhabilitación de María Corina Machado.