La agencia federal indica su aviso no altera usos aprobados para la malaria, el lupus y la artritis reumatoide.
Washington, D.C.— La Administración Federal de Alimentos y Medicamentos, FDA, advirtió que la hidroxicloroquina y la cloroquina pueden ocasionar ritmos cardíacos anormales, como la prolongación del intervalo QT y un ritmo cardíaco peligrosamente rápido llamado taquicardia ventricular en pacientes bajo tratamiento anti COVID-19.
En un comunicado, la entidad recomienda a hospitales y centros médicos que continuará investigando dichos medicamentos así como sobre los riesgos asociados con el uso de hidroxicloroquina y cloroquina para el COVID-19 y comunicará al público conforme obtengan más información.
La FDA señaló que conoce de informes sobre problemas graves del ritmo cardíaco en pacientes que están sufriendo la enfermedad así como del uso incremental combinado con la azitromicina y otros medicamentos para la prolongación del intervalo QT, así como del uso creciente de los mismos mediante recetas para pacientes ambulatorios.
“Por lo tanto, nos gustaría recordarles a los profesionales del cuidado de la salud y también a los pacientes de los riesgos ya conocidos asociados tanto con la hidroxicloroquina como con la cloroquina.
La FDA precisó que se están estudiando estos medicamentos en ensayos clínicos para el COVID-19, y “hemos autorizado su uso temporal durante la pandemia del COVID-19 para el tratamiento del virus en pacientes hospitalizados cuando los ensayos clínicos aún no están disponibles, o cuando la participación no sea factible, mediante una Autorización de Uso de Emergencia (EUA, por sus siglas en inglés).”
Los medicamentos que se están utilizando conforme a la EUA de hidroxicloroquina/cloroquina son suministrados por la Reserva Estratégica Nacional, el depósito nacional de suministros médicos críticos a ser utilizados durante emergencias de salud pública.
La advertencia de seguridad recuerda a los médicos y al público, de la información de riesgo que se describe en las hojas informativas para los proveedores del cuidado de la salud para la hidroxicloroquina y la cloroquina exigidas por la EUA.
Subraya que dichos riesgos pueden aumentar cuando estos medicamentos se combinan con otros usados para prolongar el intervalo QT, incluyendo el antibiótico azitromicina, usado en algunos pacientes con COVID-19 y que aún no cuenta con la aprobación de la FDA para esta enfermedad.
Agrega que los pacientes que también padecen otros problemas de salud tales como enfermedades cardíacas y renales tienen mayores probabilidades de sufrir riesgos incrementados de los problemas cardíacos al recibir estos medicamentos.