Cristiana Chamorro, de 68 años, quien se perfilaba como una de los favoritos para derrotar a Daniel Ortega en las elecciones de noviembre de 2021, fue detenida y permanece bajo arresto domiciliario desde el 2 de junio del pasado año. (Foto: Cortesía de la Voz de América).

Cristiana Chamorro, quien intentó retar a Daniel Ortega en las elecciones presidenciales de Nicaragua de 2021, sería llevada a juicio este jueves por varios cargos que los activistas denuncian han sido fabricados en su contra.

Managua, Nicaragua — La ex aspirante presidencial Cristiana Chamorro, hija de la expresidenta nicaragüense Violeta Barrios de Chamorro, irá a juicio este jueves, según informaron los abogados que llevan el caso.

Chamorro, de 68 años, se perfilaba como una de los favoritos para derrotar a Daniel Ortega en las elecciones de noviembre de 2021 fue detenida y permanece bajo arresto domiciliario desde el 2 de junio del pasado año.

Dos exempleados de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, el conductor personal de la opositora y su hermano Pedro Joaquín Chamorro, detenidos en las celdas de la cárcel de El Chipote, en Managua, comparecerán en el juicio donde se les vincula con Cristiana.

Chamorro, y los exempleados Walter Gómez y Marcos Fletes, están acusados del supuesto delito de gestión abusiva, falsedad ideológica, apropiación y retención indebida y lavado de dinero bienes y activos por medio Fundación Violeta Barrios de Chamorro, dedicada a fortalecer el periodismo nicaragüense.

En tanto, a su conductor personal Pedro Vásquez ha sido acusado del delito de colaborador necesario para lavado de dinero, bienes y activos.

El hermano de Chamorro, Pedro Joaquín, también es acusado de gestión abusiva, falsedad ideológica, apropiación y retención indebida.

Más de 60 periodistas citados a Fiscalía

Durante el supuesto proceso investigativo contra Chamorro, más de 60 periodistas fueron citados a la Fiscalía para ser interrogados. Según algunas denuncias de los reporteros, más que una recopilación sobre el trabajo que ejercían en conjunto con la Fundación, las entrevistas de los Fiscales eran intimidaciones y amenazas de cárcel y se les recriminaba por “mentir” a través de sus notas periodísticas.

“Denunciamos internacionalmente la criminalización de periodistas independientes en Nicaragua. Hacemos un llamado al régimen de Daniel Ortega a detener su estrategia de inmiscuir a periodistas en luchas políticas”, dijo en su momento la organización de Periodistas y Comunicadores en Nicaragua, (PCIN).

Esta organización, que integra a profesionales del gremio periodístico, expresó que la prensa independiente no obedece “a poderes políticos o económicos”, sino al compromiso diario de seguir informando “la corrupción estatal y sus arbitrarias estrategias”.