De 36 años recién cumplidos, ha despertado la esperanza entre los progresistas, así como el temor de que las décadas de estabilidad económica de Chile sean atacadas.
Santiago de Chile — Gabriel Boric asumió el mando el viernes como el presidente más joven de la historia de Chile, iniciando un giro a la izquierda en el país sudamericano tras prometer reformas sociales y económicas y aprovechar la ola de insatisfacción de los votantes con el statu quo político.
Exlíder de protestas estudiantiles y legislador tatuado, que no usó corbata durante la ceremonia, Boric supone un cambio radical con respecto al multimillonario saliente Sebastián Piñera. De 36 años recién cumplidos, ha despertado la esperanza entre los progresistas, así como el temor de que las décadas de estabilidad económica de Chile sean atacadas.
«Ante el pueblo y los pueblos de Chile, sí, prometo», dijo el nuevo mandatario.
La ceremonia tuvo lugar en la sede del Congreso en el puerto de Valparaíso, a unos 100 kilómetros al oeste de Santiago, ante un número reducido de 500 asistentes debido a la pandemia de coronavirus. Entre los invitados figuraban el presidente de Argentina, Alberto Fernández, el de Perú, Pedro Castillo y el de Bolivia, Luis Alberto Arce, así como el rey Felipe de España, entre otros.
Más temprano, un Congreso renovado inició el año legislativo y eligió a los líderes de ambas cámaras, el socialista Álvaro Elizalde en el Senado y el socialdemócrata Raúl Soto en Diputados.
Antes de prestar juramento en el salón de honor del Congreso en el puerto de Valparaíso, 120 kilómetros al noroeste de la capital chilena, compartió un desayuno con dirigentes sociales en el vecino Palacio de Cerro Castillo, mientras los miembros del nuevo Parlamento mientras juraban en sus cargos. Más tarde se formalizará el nombramiento de las 14 mujeres y 10 hombres que integraran su gabinete, con el que buscará inaugurar lo que ha denominado un “gobierno feminista”, informa la Voz de América.
Ya convertido en el nuevo presidente para el período 2022-2026, Boric y la primera dama Irina Karamanos ofrecerán una recepción a los invitados al cambio de mando para regresar al atardecer a la sede de gobierno en Santiago, desde donde dirigirá un tradicional mensaje a los chilenos.
Tras ganar la segunda vuelta presidencial de diciembre con un 56% de los votos ante el ultraderechista José Antonio Kast, Boric afirmó que “vamos a expandir los derechos sociales y lo haremos con responsabilidad fiscal». También advirtió que “los cambios los vamos a tener que hacer paso a paso, porque si no el riesgo de retroceder es demasiado grande”.
La nueva generación que llega al poder con Boric también prioriza las medidas medioambientales para hacer frente al cambio climático que azota fuerte al país sudamericano con extensas sequías y la desertificación de ciudades.