No es cuestión de edad, de educación, ni de generación, raza, sexo, género, cultura o ideología, profesión, clase social o problemas físicos, económicos o transculturales. No dude de su criterio. Es ignorancia envuelta en mal gusto “elevada” a valor social.

La ignorancia como valor social. Hay ejemplos todos los días. Es probable que si usted tiene más de 25 años no conociera a una famosa trapera, Tokisha, hasta que se enteró por los periódicos (entre ellos éste) de que se había hecho una foto en el Santo Cerro.

Por Inés Aizpún*

“La ignorancia se está convirtiendo en un valor social”. La cita es el titular de una entrevista a la educadora Catherine L’Ecuyer publicada en El Mundo y en la que, como experta mundial en el uso de la tecnología entre menores, alerta sobre decisiones políticas y docentes que condenan a los pequeños (y medianos) estudiantes a una educación de peor calidad.

La ignorancia como valor social. Hay ejemplos todos los días. Es probable que si usted tiene más de 25 años no conociera a una famosa trapera, Tokisha, hasta que se enteró por los periódicos (entre ellos éste) de que se había hecho una foto en el Santo Cerro.

La “transgresión” de fotografiarse en iglesias para desafiar al “orden establecido” es algo viejo… por lo menos desde que Madonna sedujo a San Martín de Porres en un video. (Para actualizar la performance tendrían que haber hecho la sesión de fotos en la mezquita de Gazcue.)

Que además Tokisha hiciera un dúo con Rosalía promocionó extraordinariamente a ambas. Su equipo de prensa explica las razones del éxito de la joven dominicana: “Apostar por un estilo propio de marcado carácter reivindicativo y acompañarlo de unas letras tan crudas como explícitas”.

No es para tanto. Al lado de un relato del marqués de Sade (S.XVIII), en ese video las dos jóvenes cantantes son ursulinas haciendo el tonto en el recreo… ¿Realmente sus letras provocan? ¿Provocan qué, a quién? Clichés, obviedades, simplezas, ordinarieces…

No es cuestión de edad, de educación, ni de generación, raza, sexo, género, cultura o ideología, profesión, clase social o problemas físicos, económicos o transculturales.
No dude de su criterio. Es ignorancia envuelta en mal gusto “elevada” a valor social.

*Periodista y directora de Diario Libre. Artículo publicado en AM, Diario Libre, 6 de septiembre, 2021.