El organismo financiero indicó que el brote requiere una respuesta global.
Washington, D.C.–El Fondo Monetario Internacional, FMI, tiene disponible cerca de 50-mil millones de dólares a través de sus facilidades de financiamiento de emergencia de rápido desembolso para países de bajos ingresos y mercados emergentes que podrían buscar apoyo ante la amenaza del coronavirus.
Del monto total, US$10 mil millones están disponibles a cero intereses para los miembros más pobres a través de la Línea de Crédito Rápido, reveló la directora-gerente del FMI, Kristalina Georgieva.
Durante una rueda de prensa conjunta con el presidente del Grupo del Banco Mundial, David Malpass, sobre la respuesta de los organismos financieros al coronavirus, la funcionaria del órgano rector que representa a 189 estados miembros expresó su más profundas condolencias por todo el sufrimiento que está causando el brote.
Cómo afectaría la economía
Georgieva precisó que lo primero es ubicar los escenarios. “Primero, el impacto potencial en la economía global en el contexto de lo que sabemos y lo que aún no sabemos sobre el coronavirus. Segundo, el marco sobre cómo los miembros, el Fondo y otras instituciones mundiales, pueden apoyar a los afectados por esta crisis de manera efectiva y coordinada.
Y tercero, «en espíritu de cooperación para aprender unos de otros, especialmente de los más expuestos al brote.”
La Directora-Gerente del FMI ofreció una panorámica de lo que se sabe hasta la fecha de los efectos del coronavirus entre los socios del organismo financiero mundial, al señalar que “la enfermedad se está extendiendo rápidamente. Con más de un tercio de nuestros miembros afectados directamente, esto ya no es un problema regional: es un problema global que requiere una respuesta global.”
Subrayó que la demanda también disminuirá debido a una mayor incertidumbre, un mayor comportamiento de precaución, esfuerzos de contención y el aumento de los costos financieros que reducen la capacidad de gastar. Estos efectos se extenderán a través de las fronteras.
La experiencia sugiere que cerca de un tercio de las pérdidas económicas causadas por la enfermedad serán costos directos: por pérdida de vidas, cierre de lugares de trabajo y cuarentenas. Los dos tercios restantes serán indirectos, lo que reflejará una reducción en la confianza del consumidor y el comportamiento comercial y un ajuste en los mercados financieros.
La directora del FMI subrayó que la buena noticia es que “los sistemas financieros son más resistentes que antes de la crisis financiera mundial. Sin embargo, nuestro mayor desafío en este momento es manejar la incertidumbre.” Agregó que en cualquier escenario, el crecimiento global en 2020 caerá por debajo del nivel del año pasado.
Advirtió que ello en particular será más difícil para los países con sistemas de salud y capacidad de respuesta más débiles, que requieren un mecanismo de coordinación global para acelerar la recuperación de la demanda y la oferta.