Estados Unidos entregará la mitad de los donativos a países de ingresos medianos y bajos. El anuncio fue hecho por el primer ministro británico, Boris Johnson, tras una sesión con el presidente estadounidense Joe Biden, en el Reino Unido.
Londres, Reino Unido–El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció que el Grupo de los Siete, que iniciará una cumbre este viernes en Inglaterra, donará 1.000 millones de vacunas contra COVID-19 a países de medianos y bajos ingresos.
Johnson hizo el anuncio el jueves, después que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijera horas antes que su administración donaría 500 millones de dosis de la vacuna de Pfizer, la mitad de la aportación del G-7.
«Vamos a ayudar al mundo a salir de esta pandemia trabajando junto a nuestros aliados globales”, dijo Biden, informa la Voz de América.
La donación de Gran Bretaña será de 100 millones de dosis.
El envío de las dosis de Estados Unidos comenzará en agosto “tan pronto como salgan de la fábrica”, dijo Biden en Cornwall y añadió que 200 millones de dosis serán entregadas para hasta fines de este año y 300 millones en el primer semestre de 2021.
El presidente precisó que la donación no tiene condiciones. “Hacemos esto para salvar vidas, para poner fin a esta pandemia”.
El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, secundó el anuncio de Biden.
“Estamos haciendo ensayos de la respuesta de nuestras vacunas a las variantes que han salido”, explicó Bourla, quien aseguró que ninguna de ellas ha escapado a la protección de la vacuna.
Con la promesa, Estados Unidos confía en liberarse de la incómoda reputación de ser un acumulador de vacunas.
La cumbre Biden-Johnson
Antes del anuncio de la vacuna, Biden se reunió el jueves con Johnson, con quien ha tenido desacuerdos en el pasado, entre ellos el Brexit. En una ocasión Biden llamó a Johnson un clon de Donald Trump.
Los líderes acordaron una nueva Carta Atlántica, modelada bajo una declaración del exprimer ministro británico Winston Churchill y el presidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt en 1941 para promover la democracia y el libre comercio, la cual fue instrumental para dar forma al orden global después de la Segunda Guerra Mundial.
La Carta Atlántica 2021 subraya que, con valores similares y fortaleza combinada, los dos países trabajarán unidos para enfrentar los enormes desafíos que enfrenta el planeta, desde el COVID-19 y el cambio climático hasta mantener una seguridad global.