Una fibra insertada en una N95 común puede detectar microgotas en aerosoles exhalados para su análisis.
Washington, D.C.–Dada la actualidad cuando muchas personas usan mascarillas para protegerse a sí mismas y a los demás, algún día esa misma protección facial podría recopilar información de salud útil.
Los investigadores que informan en Química Analítica de ACS han demostrado que una fibra insertada en una mascarilla facial N95 ordinaria puede recolectar compuestos en aerosoles respiratorios exhalados para su análisis.
El nuevo método podría permitir la detección de biomarcadores de enfermedades a gran escala.
El aliento exhalado es un aerosol que contiene una variedad de compuestos volátiles y no volátiles disueltos en microgotitas.
Algunas de estas moléculas podrían proporcionar información de salud importante, como si una persona tiene una determinada enfermedad o cómo su cuerpo metaboliza los medicamentos que está tomando.
La espectrometría de masas es una técnica sensible que puede ayudar a identificar estos compuestos. Pero primero, se deben recolectar cantidades suficientes de moléculas, lo que a menudo requiere procedimientos tediosos, como respirar en un tubo o bolsa.
Bin Hu y sus colegas se preguntaron si podrían encontrar una manera de usar máscaras faciales, que muchas personas usan de todos modos, para recolectar y concentrar los compuestos exhalados al respirar para un análisis posterior de espectrometría de masas.
Para probar su idea, los investigadores recortaron una fibra de microextracción en fase sólida, (SPME), dentro de una mascarilla N95. Las fibras SPME se han utilizado anteriormente para extraer compuestos del aliento recogidos por otros métodos.
Los voluntarios realizaron muchas actividades diferentes, como comer un plátano o ajo, fumar un cigarrillo o tomar una taza de café. Luego, los voluntarios usaron las máscaras durante 2 horas, y los investigadores quitaron las fibras SPME y las analizaron mediante espectrometría de masas.
Para cada actividad, los investigadores detectaron compuestos específicos, incluso algunos que estaban presentes en cantidades mínimas: por ejemplo, compuestos de azufre volátiles por comer ajo, nicotina por fumar y cafeína por beber café.
Los investigadores esperan que el método inspire estudios de biomarcadores para enfermedades respiratorias que requieren que las personas usen máscaras en la vida cotidiana.
Los autores reconocen la financiación de la Fundación Nacional de Ciencias Naturales de China y la Fundación para el Programa de Inicio de Nuevos Profesores de la Universidad de Jinan.