Breve apología en el día internacional burro.

Por el arquitecto Elmer González*

¿Qué te hice para que me golpearas así tres veces?

¿Acaso yo no soy tu asna, la que siempre has montado hasta el día de hoy?

¿Acostumbro yo a tratarte de ese modo?

De gran trascendencia histórica, el Burro en la mitología, fue vinculado al Dios Príapo por las características extendidas intrínsecas del miembro fálico del cuadrúpedo.

Este noble cuadrúpedo es el transporte usado por el Mesías durante la celebración del Domingo de Ramos, en su llegada a Jerusalén; el mismo Jesús de Nazaret llegó montado sobre de un burro y recibido por la multitud con hojas de palma.

Incluso, el nombre de este singular animal es citado 15 veces en pasajes y versículos de la Biblia, generalmente como ejemplo de trabajo y Paz.

Los chinos consideran la grasa apropiada para mejorar la circulación sanguínea, para la menstruación irregular, para la anemia, el insomnio o el mareo.

Lo consideran un alimento que tan virtuoso como el ginseng. Desde tiempos ancestrales se considera que el consumo de la leche de burra retrasa el proceso de envejecimiento, repotencia el sistema inmunológico y la virilidad. Cleopatra usaba la lactosa para rejuvenecer el rostro. De hecho, el queso de leche de burra es considerado como uno de los más caros del mundo.

Cabe destacar que es un animal generalmente pacifico; el asno vive la mayor parte de su vida en ambientes bastante secos y al no requerir de elevadas cantidades de agua es idóneo para el trabajo en climas cálidos.

Este mamífero posee el gran mérito de ser la herramienta de trabajo y transporte ecológico que cimenta el desarrollo del campo en muchos países de América.

Es digno de análisis sobre el caso de que el asno, es el animal que simboliza al Partido Demócrata de los Estados Unidos frente al elefante del Partido Republicano, aspectos que presenta enfoques anecdóticos de gran interés ideológico.

Indudablemente he tenido gran admiración el asno y su hembra, con la certeza que ambos constituyen un emblema nacional de la República Dominicana.

En la formación social en pueblos sureños se aprende a entender y luchar contra la infravaloración que se tiene de este animal.

Es preciso destacar que el territorio Quisqueyano fue el escenario en 1495 de la primera aparición del burro en el Nuevo Mundo, esto con la llegada de (4 machos y dos hembras) en la tercera expedición del Almirante Genovés. Este representante de la familia de los equinos ha sido un puntal histórico en el desarrollo urbano y rural de la patria.

En el país, se registra como un gran hito histórico que resalta en toda la región caribeña y evidencia la exportación por el Puerto de Barahona de 5,000 burros a Grecia en 1946, siendo este hecho uno los primeros grandes pasos de las negociaciones internacionales a gran escala de la República Dominicana en el siglo XX.

Erróneamente, desde nuestra óptica, los burros mundialmente son sinónimos de una de débil inteligencia coronados con una reputación de terquedad animal. En las asignaturas de historia en la secundaria se estudiaba como los egipcios representaban a la ignorancia con una cabeza de este animal. Generalmente el humano interpreta esta resistencia y desobediencia del burro como símbolos de brutalidad.

En importante entender que el comportamiento del animal es debido a un agudo de instinto de conservación altamente desarrollado, que hace difícil forzar o doblegar a un burro a hacer algo que contradiga sus propios intereses animales.  Se puede asegurar que son animales inteligentes, a veces más que los caballos.

Es preciso destacar que el Burro dominicano, no solo significa una herramienta de trabajo y representa el transporte más ecológico, económico y divertido en algunas regiones del Sur de nuestro país. También su carne es consumida en comunidades del Sur; en los fronterizos Villa Jaragua y Duvergé se vende la carne de burro por libras y trozos en las carnicerías de esas comunidades.

Sin embrago, el burro es un animal casi olvidado en la patria de Duarte; firmemente en el país debe existir un día nacional del burro. Existe una relación conceptual entre el avasallamiento de algunos poderes políticos dominicanos con la historia de la asna que habló en la historia bíblica de Balaam, la Patria debe ya tener un burro que hable.

Cada región tiene sus héroes y símbolos; el burro dominicano es uno de ellos. El país debe tener un rucio como el de Sancho. En el imaginario patriótico dominicano siempre se ha tenido un Platero.

*Breve sobre el arquitecto Elmer González Cavallo:

Es un prestigioso catedrático, urbanista y arquitecto dominicano, quien ha sido reconocido en importantes escenarios tanto dentro de la República Dominicana como en el exterior del país, tomando de referencia su capacidad y logros profesionales en el sector, donde ha contribuido en gran manera al desarrollo de su país.

Es Secretario General de la Unión de Escuelas y Facultades de Arquitectura de América Latina, UDEFAL para América Latina, además de académico, investigador, ensayista, planificador y con Master E.S y / Master G.U.

También se  desempeña como Consultor Internacional y Especialista en Cooperación Internacional.